Durante la reciente jornada organizada por el Programa de Empresa UEX, impulsado por el Colegio Mayor Albalat con el respaldo del IESE Business School, se contó con la destacada presencia de Íñigo Parra, presidente de Stadler Valencia. En su ponencia, ofreció una visión empresarial basada en su experiencia acumulada, abordando cuestiones como la evolución industrial, el liderazgo estratégico y el papel emergente de la inteligencia artificial en el entorno corporativo actual. Su intervención fue recibida con gran interés por parte de estudiantes, profesionales y directivos asistentes al evento.
Desde los primeros minutos, Parra quiso acercarse a los asistentes compartiendo detalles de su propia trayectoria formativa. Reconoció que su inclinación hacia la ingeniería no fue inmediata, ya que inicialmente contempló otras vías como la medicina o la psiquiatría. Esta reflexión inicial sobre su vocación permitió a los presentes conectar con su historia desde una perspectiva humana. Durante su etapa universitaria, destacó por su capacidad de iniciativa y por implicarse en diversos proyectos, lo que marcó el inicio de una carrera rica en experiencias y aprendizajes. Ese espíritu emprendedor fue, según relató, uno de los pilares que definieron su evolución profesional hacia roles de mayor responsabilidad y liderazgo.
Su formación posterior en el Máster del IESE Business School en Barcelona supuso un punto de inflexión en su forma de entender el mundo empresarial. Parra explicó que esta etapa académica le proporcionó herramientas estratégicas valiosas para afrontar entornos exigentes, complejos y cambiantes. Más allá de los conocimientos técnicos, valoró especialmente el enfoque holístico que recibió, el cual le permitió desarrollar una visión empresarial capaz de integrar innovación, gestión de personas y análisis del entorno. En este sentido, remarcó que el aprendizaje continuo y el desarrollo de una mentalidad estratégica son claves para adaptarse a los desafíos de un entorno competitivo.
Uno de los momentos determinantes en su trayectoria llegó cuando, con tan solo 32 años, fue designado para liderar una planta industrial ubicada en Valencia, heredera directa de la antigua Macosa. En aquel entonces, el contexto era difícil: la empresa contaba con 465 trabajadores y arrastraba pérdidas significativas. Parra relató cómo, con perseverancia y visión de largo plazo, logró revertir esta situación y sentar las bases de un modelo productivo más eficiente y sostenible. Bajo su liderazgo, y tras sucesivas transformaciones en la propiedad de la planta, la instalación ha crecido hasta superar los 2.700 empleados y alcanzar una cartera de pedidos valorada en cerca de 5.600 millones de euros. Este éxito, afirmó, se debe a una combinación de gestión eficiente y fuerte arraigo al entorno local.
Formación, adaptación al cambio y transformación tecnológica: claves del discurso de Íñigo Parra
En su discurso, Parra subrayó la necesidad de que los líderes del futuro mantengan una mirada crítica y global sobre el panorama internacional. En un mundo marcado por la inestabilidad geopolítica y los cambios acelerados, insistió en que la formación empresarial no puede centrarse únicamente en las cifras. Para él, resulta imprescindible desarrollar una capacidad de análisis que contemple también las dinámicas sociales, culturales y políticas. La comprensión global del contexto, afirmó, es esencial para tomar decisiones acertadas y anticiparse a posibles crisis, tanto en el plano nacional como en el internacional.
Respecto a la formación profesional, defendió que comenzar a trabajar pronto puede aportar mayores beneficios que continuar con estudios prolongados sin una meta clara. Según su experiencia, las habilidades más relevantes para un buen liderazgo —como la toma de decisiones, la gestión de equipos y el manejo emocional— se adquieren con mayor solidez en el entorno laboral. Asimismo, recomendó a los jóvenes mantener hábitos de lectura y formación constante, y aprovechar al máximo los recursos ofrecidos por instituciones como el Colegio Mayor Albalat, cuya labor en el acompañamiento y crecimiento personal considera determinante. Esta combinación de teoría y práctica, añadió, es clave para destacar en un entorno empresarial exigente.
Uno de los ejemplos que compartió sobre la toma de decisiones en situaciones inciertas fue la apuesta por incrementar la capacidad productiva sin tener garantizada una demanda específica. Parra explicó que diseñar y fabricar sin márgenes de error supone un riesgo importante, pero que este tipo de desafíos son necesarios para consolidar una posición de liderazgo en el mercado. En su opinión, esta mentalidad es la que permite a las empresas avanzar, innovar y generar valor. Apostar por el empleo en España y promover una cultura organizativa comprometida con la innovación y el desarrollo social fueron también temas que destacó durante su intervención. En definitiva, instó a fomentar un modelo de empresa centrado en el compromiso y en la mejora constante de la productividad.
En relación con la inteligencia artificial, Parra advirtió que esta tecnología está transformando radicalmente numerosos sectores. Comentó que los sistemas generativos actuales ya son capaces de aprender de forma autónoma, lo que abre múltiples posibilidades pero también plantea riesgos considerables. Lo más preocupante, dijo, es que estas herramientas son muy potentes y, al mismo tiempo, están al alcance de cualquiera. Esto implica una gran responsabilidad por parte de quienes las desarrollan y utilizan. Por ello, animó a las nuevas generaciones a formarse en pensamiento crítico, con el fin de identificar las verdaderas oportunidades tecnológicas y evitar caer en el uso irresponsable de herramientas cuyo impacto puede ser perjudicial. Fomentar una ética sólida será, en su opinión, esencial para construir un futuro tecnológico responsable y sostenible.
El recorrido profesional de Íñigo Parra al frente de Stadler Valencia
Actualmente, Íñigo Parra preside Stadler Valencia, compañía dedicada al diseño y fabricación de material ferroviario desde su sede en la ciudad de Valencia. Con más de dos décadas liderando la firma, ha conseguido posicionarla como una referencia en el ámbito europeo, gracias a una gestión enfocada en la innovación y en el crecimiento sostenible. Bajo su dirección, la planta ha multiplicado su producción, aumentado sus capacidades técnicas y ampliado significativamente su influencia en el mercado internacional. Este crecimiento se ha consolidado mediante inversiones estratégicas en infraestructura, formación y desarrollo de nuevas tecnologías.
Entre sus principales iniciativas destaca la creación de un centro de excelencia en ingeniería, destinado a reforzar la capacidad de innovación de la compañía. Además, promovió la fundación de un centro interno de Formación Profesional, con el objetivo de mejorar la capacitación de los trabajadores y facilitar la inserción laboral de jóvenes en el sector ferroviario. Esta apuesta por el talento técnico ha convertido a Stadler Valencia en un referente de colaboración entre empresa y educación, alineado con las necesidades reales de la industria. El impulso a la formación técnica y el compromiso con la inserción laboral han sido claves para generar un entorno de trabajo competente y sólido.
Antes de asumir su actual cargo, Íñigo Parra trabajó en el sector de las telecomunicaciones. Fue director del Servicio de Atención al Cliente en Alcatel y más tarde dirigió la división de comunicaciones en Philips. Posteriormente, asumió la dirección general de Alstom Transporte S.A. en Valencia y, poco después, fue nombrado vicepresidente mundial de locomotoras en la misma empresa. Tras la adquisición de la planta por Vossloh en 2005, Parra fue designado director ejecutivo y, en 2009, se convirtió en presidente de Vossloh España. Desde entonces, ha continuado liderando la compañía durante su transición al grupo Stadler, con una trayectoria marcada por la coherencia, el compromiso y la búsqueda constante de la excelencia industrial y el liderazgo internacional.