Si alguna vez has tenido una infección del tracto urinario, sabes bien lo incómoda que puede resultar: escozor al orinar, ganas continuas de acudir al baño y esa constante molestia que no desaparece. Pero ¿qué ocurre cuando estas infecciones vuelven una y otra vez? Se convierten en un inconveniente persistente que afecta tu rutina diaria y tu bienestar emocional.
La buena noticia es que existen diversas maneras de prevenirlas y mejorar tu calidad de vida. En esta guía práctica, te proporcionamos todo lo que necesitas conocer para mantener tu sistema urinario saludable y libre de infecciones.
¿Por qué las infecciones de orina reaparecen?
Antes de centrarnos en la prevención, es esencial entender qué está sucediendo en el organismo. Cuando las infecciones urinarias son recurrentes, pueden tener dos causas principales:
Reinfección: Es la más común. Se produce cuando una bacteria nueva, generalmente proveniente del intestino, alcanza nuevamente la vejiga y provoca una nueva infección.
Recaída: En este caso, la misma bacteria responsable de la infección anterior no fue eliminada completamente y vuelve a generar síntomas poco después del tratamiento.
Existen factores que pueden aumentar la predisposición a estas infecciones:
✅ Anatomía femenina: La uretra en las mujeres es más corta, facilitando la llegada de bacterias a la vejiga.
✅ Uso prolongado de antibióticos: Puede alterar la flora vaginal, favoreciendo el crecimiento de bacterias perjudiciales.
✅ Cambios hormonales: Especialmente tras la menopausia, ya que la disminución de estrógenos modifica la flora vaginal y eleva el riesgo de infecciones.
✅ Alteraciones en el aparato urinario: Como cálculos renales o problemas para vaciar completamente la vejiga.
Señales a las que debes prestar atención
Identificar los síntomas tempranamente permite actuar antes de que la infección avance. Estate atenta a estas señales:
Ardor o escozor al orinar.
Necesidad constante de acudir al baño, aunque se expulse poca orina.
Orina turbia o con olor fuerte.
Sensación de presión o dolor en la parte baja del abdomen.
Si además presentas fiebre, dolor en la parte baja de la espalda o escalofríos, es posible que la infección haya alcanzado los riñones. En este caso, consulta de inmediato con un profesional de salud.
Hábitos diarios para evitar la cistitis
Realizar pequeños cambios en tu rutina puede tener un gran impacto. Aquí te dejamos algunas recomendaciones clave:
1. Mantén una correcta higiene íntima
Lava la zona genital siempre de adelante hacia atrás para impedir que las bacterias del ano lleguen a la uretra.
Emplea jabones suaves, sin perfumes ni sustancias agresivas.
Evita las duchas vaginales y las esponjas, ya que pueden alterar la flora natural.
Usa ropa interior de algodón y cámbiala cada día.
2. Hidrátate adecuadamente
Bebe al menos 2 litros de agua diarios para garantizar un flujo urinario constante y favorecer la eliminación de bacterias.
No retengas las ganas de orinar. Acude al baño cada dos o tres horas y asegúrate de vaciar completamente la vejiga.
Modera el consumo de café, bebidas alcohólicas y refrescos azucarados, ya que pueden irritar la vejiga.
3. Mejora tu alimentación
Añade alimentos ricos en vitamina C, como naranjas, fresas o kiwis, que ayudan a acidificar la orina y dificultan el desarrollo bacteriano.
⚕️ Los probióticos presentes en yogures naturales contribuyen a mantener una flora vaginal y urinaria equilibrada.
Reduce la ingesta de azúcar y productos ultraprocesados, ya que favorecen la proliferación de bacterias no deseadas.
4. Fortalece el suelo pélvico
Realizar ejercicios de Kegel contribuye a fortalecer la musculatura pélvica y facilita el vaciado completo de la vejiga. Son muy simples: contrae los músculos del suelo pélvico durante 5 segundos y relájalos. Haz series de 5 repeticiones.
♀️ Mantente activa practicando ejercicio moderado como caminar, nadar o yoga. Un estilo de vida saludable beneficia el sistema urinario.
¿Qué hacer si las infecciones son frecuentes?
Cuando las infecciones urinarias se repiten con regularidad, es imprescindible consultar con un especialista. En algunos casos, el médico podría sugerir:
Antibióticos específicos: Solo cuando sean necesarios y siempre siguiendo el tratamiento completo, aunque los síntomas desaparezcan antes.
Tratamientos preventivos: Algunas mujeres pueden beneficiarse de antibióticos en dosis bajas por un tiempo o después de mantener relaciones sexuales, si esto es un factor desencadenante.
Solución avanzada para el bienestar urinario
La gama Urocran® está formulada para cuidar la salud urinaria, ofreciendo una solución efectiva tanto para la prevención como para el tratamiento complementario de la cistitis recurrente y otras infecciones del tracto urinario.
Su innovadora fórmula, basada en D-Manosa, PAC tipo A del arándano rojo y una mezcla de probióticos, permite a Urocran® y Urocran® Forte actuar conjuntamente para impedir la adhesión de bacterias patógenas a las paredes de la vejiga y reforzar la microbiota urogenital.
Además, su uso es seguro para mujeres embarazadas y en periodo de lactancia, convirtiéndolo en una opción fiable y eficaz para mantener la salud urinaria en equilibrio.
Recupera tu bienestar y despídete de la cistitis recurrente
Las infecciones urinarias pueden resultar realmente molestas, pero con algunos cambios sencillos en tu día a día y un enfoque preventivo, puedes reducir su frecuencia y mejorar tu calidad de vida.
Una correcta hidratación, higiene íntima, alimentación balanceada y ejercicio regular son esenciales para cuidar la salud del sistema urinario.
Si los episodios se presentan con frecuencia, no dudes en acudir a un especialista para encontrar la solución más adecuada.
Urocran® es un gran aliado en la prevención y el tratamiento complementario de la cistitis recurrente.
Toma las riendas de tu bienestar y dile adiós a las infecciones urinarias. ¡Tu salud está en tus manos!