(dpa) – El mercado de cruceros es difícil de abarcar por completo. Hay barcos gigantes para más de 6.000 pasajeros, pero también embarcaciones más pequeñas. A bordo se ofrecen diferentes idiomas, precios moderados pero también otros que marean por lo altos. ¿Cómo encuentran los viajeros el que más les conviene en medio de esta enorme oferta, y en qué se diferencian los proveedores? Aquí, un panorama:
En concreto, cuatro grandes operadores dominan el mercado. Royal Caribbean Group (RCI), Carnival Corporation y Norwegian Cruise Line Holdings (NCL) son los mayores operadores, según cruisemarketwatch.com, y los tres cotizan en bolsa. El cuarto actor, Mediterranean Shipping Company, con sede en Ginebra, opera tanto en el transporte marítimo de contenedores como en el negocio de cruceros como MSC Cruises y es de propiedad privada.
Forman parte de Carnival Corporation Aida Cruises, con doce buques, Carnival Cruise Lines, Costa Cruceros, Cunard Line con los tres buques «Queen», Holland America Line, Princess y Seabourn Cruises, así como P&O Cruises y P&O Australia.
Más grande, más colorido, más alocado
Royal Caribbean, con sede en Miami, afirma tener 63 barcos en los océanos del mundo, también bajo diferentes marcas. La flota «Mein Schiff» de Tui Cruises, compuesta por seis cruceros, por ejemplo, pertenece en un 50 por ciento a RCI. RCI también posee una participación en Hapag-Lloyd Cruises, así como en Silversea y Celebrity Cruises.
Los gigantescos transatlánticos estadounidenses están presentes en el Caribe y Sudamérica, aunque en verano navegan también hacia clásicos europeos como las Islas Canarias y recorren el Mediterráneo. Asimismo, los barcos de Tui y Aida llegan, por ejemplo, a destinos como el Caribe o la costa este de Estados Unidos, alrededor de Nueva Inglaterra.
La carta de presentación de los estadounidenses es que todo es más grande, más colorido y, a veces, más alocado. Prueba de ello es que los cinco cruceros más grandes por capacidad de pasajeros pertenecen a Royal Caribbean. El «Wonder of the Seas» sustituyó incluso al «Symphony of the Seas» en el número uno de la clasificación, seguido por el «Harmony», el «Allure» y el «Oasis of the Seas».
La tendencia va hacia lo superlativo
El «Wonder of the Seas» tiene capacidad para más de 5.700 personas en casi 2.870 camarotes. Unos 2.300 tripulantes cuidan de los pasajeros. En las 16 cubiertas no queda apenas nada sin ofrecer. Los barcos son como un enorme parque de atracciones y están diseñados de tal manera que los huéspedes ni siquiera tienen que desembarcar en los puertos.
Los barcos alemanes también están representados en el top 10 de los cruceros más grandes del mundo. Se trata del «Aida Nova» y el más reciente «Aida Cosma», ambos construidos en la ciudad alemana de Papenburgo y que navegan con gas licuado. Los buques tienen 337 metros de eslora y 2.732 camarotes. El buque más pequeño de la flota, el «Aida Aura», tiene «solo» 203 metros de eslora y 633 camarotes.
«Mein Schiff» de Tui Cruises está disponible actualmente en dos variantes: «Mein Schiff 1» y «Mein Schiff 2» son de construcción nueva, y cada uno de ellos puede transportar casi 2.900 pasajeros en camarotes para dos personas. Los buques con los números 3 a 6 tienen capacidad para 2.500 pasajeros cada uno.
TUI Cruises promete mucha libertad, espacio e individualidad en sus barcos de color azul oscuro, de aspecto poco llamativo y bastante sobrio, incluso en cuanto al diseño de los camarotes, los restaurantes y los servicios a bordo.
¿Qué significa realmente «inclusive»?
Aunque a primera vista los precios de Tui Cruises parecen más elevados que los de la competencia, vale la pena hacer cuentas. En estos barcos se incluyen algunos servicios que con otros proveedores cuestan más, como el alcohol, por ejemplo, o las bebidas que van más allá del agua, el café y, a veces, el vino de mesa. Los restaurantes a la carta también son gratuitos.
En líneas generales, el principio de todo incluido («all inclusive») se aplica en muchos buques. El alojamiento y la comida están pagos. Sin embargo, hay restaurantes especializados cuyos servicios se cobran aparte. A veces también hay paquetes de bebidas por un extra. Esto puede significar que el agua y el vino de mesa están incluidos, pero que hay que pagar los cócteles aparte.
Un verdadero diferencial de la flota «Mein Schiff» de Tui Cruises es que todos sus barcos tienen una piscina de 25 metros. No hay ninguna otra línea de cruceros que cuente con algo así. Si bien muchas tienen piscinas con diseños llamativos (NCL), toboganes que descienden diez cubiertas e incluso flotan sobre el mar abierto (RCI) o una ola para surfear, nadar por un carril es difícil o imposible con la mayoría de los proveedores.
Por otra parte, casi todas las navieras tienen a bordo un gimnasio y numerosos cursos deportivos, así como entrenadores personales, además de una zona de spa con saunas, masajes y servicios cosméticos. Muchas ofrecen también servicios de guardería, entretenimiento con artistas de primera línea y expertos en determinados temas (destinos turísticos, fotografía, cocina).
Una app para organizarse en el barco
Especialmente en el caso de las navieras estadounidenses, la planificación de los cruceros pasa cada vez más por las apps propias, con las que se pueden reservar los restaurantes y las excursiones en tierra. Estas deben reservarse y pagarse por separado en todas partes, aunque los huéspedes también pueden desembarcar y recorrer cada destino por su cuenta.
Una particularidad de algunas navieras es también construir sus propios buques para determinados destinos. NCL, por ejemplo, puso en servicio hace unos años el «Norwegian Bliss», que navega por las aguas árticas de Alaska. El barco está bien equipado para la lluvia y el viento árticos, y dispone de salones propios desde los que se puede observar la espectacular naturaleza circundante.
«Flora» es el nombre del barco de Celebrity Cruises que navega por las Islas Galápagos con solo 100 pasajeros, lo que lo convierte en el mayor de los tres barcos que surcan el archipiélago. El barco más pequeño de Celebrity es el «Xploration», un catamarán con solo ocho camarotes.
Celebrity también promete mucho espacio e individualidad para sus huéspedes. En los grandes buques más nuevos de la naviera, sale al rescate la llamada «Magic Carpet»: una extensión del tamaño de una pista de tenis que puede desplazarse de forma flexible por el costado del barco allí donde hay riesgo de aglomeración, como durante el día en la cubierta de la piscina o por la noche en el restaurante.
Vale la pena reservar muy temprano o muy tarde
Hapag-Lloyd Cruises, la tercera compañía además de Aida y Tui Cruises en la que se habla alemán a bordo, es el proveedor más lujoso y, por tanto, también el más caro del mercado germano, con cinco buques pequeños: los dos barcos de lujo «MS Europa» y «MS Europa 2», así como los tres barcos de expedición de idéntica construcción «Hanseatic nature», «Hanseatic inspiration» y «Hanseatic spirit».
Estos tres tienen la categoría más alta entre los barcos de pasajeros que navegan en el hielo y de poco calado, por lo que cubren rutas en el Ártico y el Antártico, además del Amazonas.
Consejo: si se busca pagar un buen precio para los cruceros, conviene reservar con mucha antelación o muy sobre la fecha, ya que a menudo hay ofertas de última hora en los sitios web de las navieras. Los destinos también pueden reservarse muchas veces con un año y medio de antelación, normalmente con un descuento por reserva anticipada.
Por Verena Wolff (dpa)