España ha defendido en la reunión del G20 la apuesta e importancia de la educación inclusiva para no dejar a ningún alumno atrás.

El secretario de Estado de Educación, Abelardo de la Rosa, defendió este miércoles durante su intervención en la reunión ministerial de educación del G20, que se celebra en Skukuza (Sudáfrica), la apuesta del Gobierno de España por un modelo de educación inclusiva “en el que ningún niño se quede atrás”, a través de mecanismos como la reducción de las ratios, el profesorado de apoyo y la codocencia en las aulas, entre otras herramientas.
Educación explicó que España ha firmado un memorando de entendimiento con el Departamento de Educación Básica de la República de Sudáfrica sobre cooperación en el aprendizaje de lenguas, con el fin de promocionar la lengua y la cultura española en Sudáfrica e incorporar a los nacionales de este país a los programas de la Acción Educativa Exterior de España.
Previamente a esta reunión, en los últimos meses, los representantes de Educación de los diferentes países participantes han trabajado sobre tres prioridades educativas: la importancia de la educación Infantil para crear sistemas educativos de calidad y evitar desigualdades sociales; el reconocimiento de cualificaciones para facilitar la movilidad de estudiantes y profesionales, y la formación y la mejora de las condiciones de trabajo del profesorado.
En educación Infantil, España cumple con los objetivos establecidos en la cumbre de la UE en Barcelona para 2030, mantiene las tasas de matriculación por encima de la media europea y de los países de la OCDE en todo el tramo de edad de 0 a 6 años, y continúa trabajando por el acceso universal, promoviendo la equidad y la inclusión, en línea con los ODS 2030 de la ONU.
En cuanto a la profesión docente, España se encuentra entre los países donde menos docentes se plantean abandonar la profesión, según el informe Talis 2025. No obstante, se reconoce que la mejora de las condiciones laborales de los docentes, en especial una menor carga administrativa, reducción de ratios y más personal de apoyo son clave para la sostenibilidad.
En cuanto al reconocimiento de cualificaciones, España apuesta por un sistema transparente que fomente la movilidad, libere el potencial de estudiantes y profesionales, y fortalezca las conexiones humanas más allá de las fronteras.
En este sentido, España ha expresado un claro apoyo a los esfuerzos de la Comisión Europea con la adopción de un paquete de ambiciosas propuestas para crear un título europeo, capaz de brindar un marco que facilite la impartición de títulos europeos conjuntos en alianzas universitarias, como las Universidades Europeas.
En este encuentro internacional España ha expuesto y defendido los principios de la formación para la ciudadanía democrática, la igualdad de género y la construcción de la paz y la solidaridad a través de la educación.