Primera prueba superada. Tres especialistas independientes contratados por la FIA se encargaron de comprobar el estado físico de Fernando Alonso, con resultados muy positivos que invitan a pensar que estará disponible en el Gran Premio de esta semana en Malasia.
Fue sometido a análisis de reflejos y a un exhaustivo examen neuronal, entre otras cosas, pero aún tiene que superar el obstáculo del delegado médico de la Federación Internacional de Automovilismo. Él será el encargado de decidir si Alonso se encuentra en condiciones se subirse a un monoplaza.
En los entrenamientos libres se podrá apreciar la forma en que llega el piloto asturiano a la prueba, pero la prueba definitiva será antes con un examen de evacuación. Para ello tendrá que desabrocharse el cinturón de seguridad y retirar el volante en cinco segundos y abandonar el coche. Todo ello en apenas diez segundos.
McLaren necesita ahora más que nunca a Fernando Alonso, sobre todo después de todas las dudas que han surgido en las últimas semanas con el rendimiento del motor y de los pilotos de la escudería.