Oviedo (España), 19 oct (dpa) – Sin hacer mención expresa a Cataluña, el rey Felipe VI respondió hoy a los independentistas que hace unos días reprobaron simbólicamente su figura y pidieron la abolición de la monarquía española con una defensa cerrada de la Constitución del país, que este año cumple 40 años.
Lo hizo en el discurso que cada octubre pronuncia en la ceremonia de entrega de los Premios Princesa de Asturias, una suerte de «Nobel españoles» que este año distinguieron, entre otros, al cineasta Martin Scorsese y a la periodista mexicana Alma Guillermoprieto.
El monarca español destacó que la Carta Magna española, impulsada tras la muerte del dictador Francisco Franco, «recuperó la soberanía nacional, devolvió a los españoles su condición de ciudadanos y reconoció la diversidad de sus orígenes y de sus pueblos».
Además, señaló que la ratificación del texto en referéndum el 6 de diciembre de 1978 fue fruto de la «la concordia de los españoles, unidos en un profundo deseo de reconciliación y paz, por el deseo de vivir en democracia».
«Democracia y libertad es lo que representa y significa para España nuestra Constitución», aseguró el monarca en la ceremonia celebrada en el Teatro Campoamor de Oviedo, en el norte de España.
El discurso de Felipe VI tiene lugar unos días después de que el Parlamento de Cataluña aprobara una declaración simbólica para reprobar al monarca, a quien los independentistas catalanes critican por el mensaje que hace un año lanzó a los españoles por televisión tras el referéndum soberanista ilegal celebrado en la región.
El rey pidió entonces a los poderes del Estado «asegurar el orden constitucional y el normal funcionamiento de las instituciones, la vigencia del Estado de Derecho y el autogobierno de Cataluña, basado en la Constitución y en su Estatuto de Autonomía».
Hoy, el monarca no hizo alusión expresa a la situación en Cataluña, pero su discurso fue interpretado por los medios españoles como una respuesta al Gobierno catalán, presidido por el independentista Quim Torra, quien hace unos días llamó a Felipe VI «hooligan con corona».
En la ceremonia celebrada en Oviedo, representantes de los tres poderes del Estado estuvieron junto al rey, ofreciendo así una imagen de unidad en torno al jefe del Estado. En la calle, cientos de personas lo recibieron con aplausos, aunque no faltaron las protestas contra la monarquía en las inmediaciones del Teatro Campoamor, como suele ser habitual en los últimos años.
El Gobierno español de Pedro Sánchez cerró filas también con el monarca y hoy inició los trámites para recurrir la declaración del «Parlament» ante el Tribunal Constitucional.
«El jefe del Estado (…) no debe ser motivo de posicionamientos de las cámaras autonómicas en relación a su figura, habida cuenta de que esas cámaras no tienen competencias para definir la forma del Estado», dijo hoy la portavoz del Ejecutivo, Isabel Celaá.
Felipe VI presidió junto a la reina Letizia la gala de entrega de los Princesa de Asturias, los premios que cada año otorga la fundación del mismo nombre. Repartidos en ocho categorías, están dotados con 50.000 euros y una escultura del artista Joan Miró.
El monarca destacó que el objetivo de estos galardondes es «rendir homenaje a las personas e instituciones que trabajan por «construir un mundo mejor, más humano y más digno». «Las necesitamos como referencias, como inspiración en los tiempos en los que vivimos, donde muchas veces prima lo efímero, lo superficial», apostilló
La reportera mexicana Alma Guillermoprieto, distinguida en la categoría de Comunicación y Humanidades, pronunció uno de los discursos más emocionantes de la gala, convertido en una oda a su profesión y en homenaje a los periodistas que trabajan en países como Venezuela, México y Nicaragua en circunstancias difíciles.
La periodista, que ha cubierto la guerrilla de Sendero Luminoso en Perú, el terrorismo de Estado en Argentina, el conflicto civil y el narcotráfico en Colombia y las guerras de la droga en México, tuvo también palabras de recuerdo para su compañero y compatriota Javier Valdez, asesinado a tiros el pasado año en Sinaloa.
También intervino en la ceremonia el director Martin Scorsese, quien al recoger el Princesa de Asturias de las Artes expresó su preocupación por el «futuro del cine» y la fragilidad del arte, «esencial para la vida», según dijo.
En esta edición de los galardones fueron premiados también la escritora francesa Fred Vargas (Letras), el filósofo estadounidense Michael J. Sandel (Ciencias Sociales), el biólogo sueco Svante Pääblo (Ciencia) y la oceanógrafa estadounidense Sylvia Earle (Concordia).
Completaron el palmarés la ONG Amref Health Africa (Cooperación) y los alpinistas Reinhold Messner y Krzysztof Wielicki (Deportes).
Por Ana Lázaro Verde (dpa)