El PP acude este domingo a las elecciones autonómicas de Cataluña con la pretensión de triplicar, cuadriplicar o incluso quintuplicar su representación parlamentaria –que ahora es de tres diputados– para volver a liderar el espacio del centroderecha y dar un gran paso en la consolidación de su proyecto a medio y largo plazo para esta comunidad.
Génova ve esta cita con las urnas como una meta volante de su estrategia en Cataluña. Ha rechazado, al menos públicamente, la posibilidad de pactar con el PSC salvo que los socialistas rompan sus acuerdos con los independentistas catalanes tanto a nivel nacional y autonómico, escenario que reconoce que es “irreal”. Y considera, además, que la repetición electoral es el desenlace más factible al albur de las encuestas.
Los populares plantean estas elecciones como una oportunidad para volver a erigirse como la alternativa a PSC, Junts y ERC, a los que han presentado como “tres patas de un mismo proyecto”. En las pasadas elecciones, el PP tocó fondo en Cataluña y sacó tres escaños. Y ahora, pese a que el adelanto electoral le pilló con el pie cambiado –sin candidato claro–, aspira a posicionarse de nuevo como la cuarta fuerza del Parlament y revertir con un golpe encima de la mesa la regresiva tendencia que arrastra desde 2012.
No obstante, la lucha con Vox por liderar el centroderecha en Cataluña está siendo más disputada de lo que preveían en Génova. Al inicio de la campaña, los populares admitían que sería “un gran fracaso” quedar por debajo de los de Santiago Abascal. Pero, a medida que se ha acercado la cita con las urnas, el PP ha rechazado mirar a Vox ante su resistencia en feudo catalán. “Estoy convencido de que vamos a pasar a ser la cuarta fuerza en Cataluña. De la novena, a la cuarta”, despejó cualquier duda este pasado miércoles el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo.
Para lograr este objetivo, el PP ha intensificado su movilización en las redes sociales, una de las fuerzas de Vox. “Movilizan muchísimo en redes en los tramos finales y siempre logran un empujón final”, reconoce uno de los principales dirigentes del PP de catalán. Y, por ello, en los últimos días de campaña ha lanzado 16 vídeos para tratar de atrapar el voto joven y frenar los apoyos a PSC y Vox. Tres de ellos se centran en la delincuencia y la ‘okupación’, y otro en sus propuestas para facilitar la emancipación de los menores de 35 años.
El PP tiene garantizada una fuerte subida gracias al trasvase de votos procedente de Ciudadanos, que apunta a que desaparecerá en la tierra que le vio nacer. No obstante, los populares estarán muy pendientes de materializar su ‘sorpasso’ a Vox en lo que sería un “gran paso” para su proyecto a medio y largo plazo.