La consejera de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente, Belén Fernández, ha recordado este sábado que el consejo de administración de Gijón al Norte rechazó en marzo de 2012 la propuesta que barajan ahora el Ayuntamiento de Gijón y el Ministerio de Fomento sobre el Plan de Vías: una estación intermodal soterrada a la altura del Museo del Ferrocarril, debido a que los servicios técnicos aseguraban entonces que «no podría soterrarse de ninguna manera, porque hay dos colectores de grandes dimensiones que marchan junto al puente de Carlos Marx y no admiten ser desviados más que algunos metros», como quedó recogido en las actas.
En opinión de Fernández, tanto la alcaldesa, Carmen Moriyón, como la ministra, Ana Pastor, «están frivolizando con un asunto estratégico para Gijón y para Asturias, porque ¿qué ha cambiado para que lo que no podía hacerse de ninguna manera hace tres años pueda llevarse a cabo ahora sin ningún problema?».
«La previsión de entrada en servicio de la estación en 2019 es un insulto a la inteligencia de los ciudadanos, una utopía. Nadie puede creer que una estación intermodal de alrededor de medio kilómetro de longitud y enterrada más de 20 metros, para la que actualmente no existen, ni redactados ni tramitados, planeamiento urbanístico, evaluación ambiental estratégica, estudio de impacto ambiental, ni proyecto constructivo, va a estar funcionando dentro de cuatro años», apunta la consejera en nota de prensa.
Para la titular asturiana de Infraestructuras, «si Pastor y Moriyón hablasen con sinceridad, dirían que en 2019 no van a estar ni los documentos en regla para empezar a contratar las obras», por lo que estos plazos imposibles no son más que «la muestra de que el Partido Popular ya asumió que no gobernará en España a partir de 2016 y se dedica a lanzar fuegos de artificio a sabiendas de que no estará en las instituciones para tener que cumplir su palabra».
Según Fernández, tanto Foro como el PP «han convertido el Plan de Vías «en un señuelo al servicio de sus intereses políticos y electoralistas». Igualmente, ha lamentado que el Ministerio de Fomento y el Ayuntamiento de Gijón «sigan empeñados en progresar en deslealtad con el Principado de Asturias, manteniendo una agenda oculta de encuentros en los que toman decisiones que corresponden a la sociedad Gijón al Norte, sustrayéndole a su consejo de administración las funciones que le son propias y apartando de las mimas al Principado».
«Resulta difícil saber sobre qué proyecto opinar, pues ha habido tantos como reuniones en el ministerio en estas últimas semanas. Las vías y la estación se soterran o afloran a la superficie, y el presupuesto sube o baja cientos de millones, con la misma facilidad que Pastor, Moriyón y sus equipos se reúnen», ha concluido.