La consejera de Desarrollo Rural y Recursos Naturales, María Jesús Álvarez, ha garantizado hoy las ayudas económicas de su departamento a las empresas agroalimentarias, sin importar su tamaño, hasta el final del periodo de vigencia del Programa de Desarrollo Rural en 2023.
Álvarez, que ha realizado este anuncio en el pleno de la Junta General, ha recordado que la iniciativa Leader gestiona, en este periodo de programación y a través de los grupos de acción local, 15,7 millones para inversiones de micropymes que transformen productos agrarios. “Esto quiere decir que cualquier emprendedor o empresario del sector, así como las grandes empresas, las pymes o las micropymes, que quieran invertir para hacer más competitiva y moderna su empresa encontrarán apoyo por parte del Gobierno”, ha destacado.
La titular de Desarrollo Rural ha puesto como ejemplo del compromiso del Ejecutivo la partida de 9,3 millones incluida en los presupuestos de este año para la convocatoria de ayudas a industrias agrarias, lo que supone un incremento del 151% respecto a 2016. En este sentido, ha añadido que hasta ahora se han presentado 88 proyectos, que promoverán inversiones por valor de unos 30 millones. Ha valorado, asimismo, el esfuerzo de modernización que realiza el sector asturiano, “hasta el punto de que anualmente la inversión global se sitúa en 40 millones”.
Esta industria, que representa el principal sector económico del medio rural, suma más de 700 empresas con una producción anual que ronda los 1.700 millones, por lo que su consolidación productiva “es clave para el desarrollo de la región”, ha afirmado la consejera. Además, Asturias es referente nacional para sectores como el lácteo, en el que la comunidad lidera la industria estatal.
De los miles de productos que se elaboran, existen seis producciones específicas dentro de los regímenes de Denominación de Origen Protegida (DOP): los quesos Cabrales, Casín, Afuega´l Pitu, Gamonéu, Vino de Cangas y Sidra de Asturias. En total, el Principado cuenta con 89 empresas agroalimentarias amparadas por estas marcas, que producen por un valor económico de 9,9 millones, un 0,58% de la producción agroalimentaria asturiana.
El Ejecutivo autonómico ha realizado este año, con fondos propios, una convocatoria de ayudas específica de 1,2 millones para apoyar estas producciones, así como el resto de elaboraciones amparadas por sellos de calidad agroalimentaria diferenciada. “Estas subvenciones son particularmente estratégicas, ya que aseguran la viabilidad de los órganos reguladores como instituciones, permiten mantener y mejorar las garantías de calidad y la diferenciación de las producciones, posibilitan realizar de forma correcta las labores de control obligatorias y aseguran su promoción”, ha apuntado Álvarez.