Berlín, 19 dic (dpa) – El interés por el idioma alemán se ha mantenido estable también en un año de crisis como 2016, comunicó Klaus-Dieter Lehmann, presidente del Instituto Goethe, durante la conferencia de prensa anual en Berlín.
Especialmente en Asia, África del Norte y en el sureste europeo existe una gran demanda por esta lengua.
Un total de 234.000 personas asistieron a cursos de alemán del instituto en el extranjero, casi 5.000 más que en el año anterior. El número de participantes en Alemania, por el contrario, disminuyó en 7.000 hasta los 38.000. En los exámenes de idioma se manifestó un aumento de 387.000 a 435.000 en total entre el extranjero y el país.
En el próximo año está previsto ampliar la oferta digital. «Queremos llegar a las personas que no hemos podido alcanzar hasta ahora», señaló Lehmann.
La presencia en Internet del instituto despierta ya actualmente gran interés. El sitio web registró 35 millones de visitas el año pasado, en las redes sociales contó con cinco millones de seguidores.
Lehmann resaltó la importancia que recae en la transmisión de cultura y educación especialmente en tiempos de crisis y guerras. «El trabajo cultural no es, sin embargo, de por sí solo pacificador, sino solamente si se trabaja y colabora con compañerismo», acotó.
Es por ello que para el Instituto Goethe es muy importante estar en contacto con los agentes sociales locales en cada país, según Lehmann. Sobre todo en países con restricciones a la libertad de expresión, como Egipto o Turquía, hay que tratar de ganar espacios para mantener un diálogo abierto.
El secretario general Johannes Ebert anunció una cuidadosa ampliación de la red de institutos. Está planeado abrir centros en Armenia y Azerbaiyán, mientras que se espera que la recién inaugurada residencia para artistas Vila Sul en Brasil se convierta en un centro del diálogo sur-sur.
El Instituto Goethe gestiona actualmente 159 sedes en 98 países. Más de un tercio del presupuesto anual de casi 400 millones de euros se cubre con ingresos propios obtenidos mediante cursos de idioma y tasas de exámenes. El Ministerio de Asuntos Exteriores alemán subvenciona el trabajo con 238 millones de euros.