OVIEDO, 24 Sep. (EUROPA PRESS) El Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) ha sido el primer centro sanitario español en implantar un nuevo dispositivo médico diseñado para favorecer una óptima colocación de la válvula aórtica transcatéter (TAVI). Este martes se realizaron dos intervenciones de estas características que resultaron un éxito y los pacientes evolucionan favorablemente, según ha informado la Consejería de Sanidad del Principado de Asturias a través de una nota de prensa.
Las operaciones las llevó a cabo un equipo compuesto por cardiólogos, cirujanos cardiacos, radiólogos y anestesistas y dirigido por el doctor César Morís, director del Área del Corazón del HUCA, que en 2007 ya protagonizó el primer implante de una válvula aórtica sin necesidad de cirugía que se realizó en España .
El sistema, desarrollado por Medtronic, es una opción de tratamiento para los pacientes con estenosis aórtica severa, que presentan un riesgo elevado o no pueden ser operados mediante cirugía a corazón abierto. Según los responsables sanitarios, además de mejorar la seguridad en el procedimiento, permite volver a capturar la válvula y reposicionarla cuando el implante no se considera óptimo, lo que asegura un posicionamiento preciso del dispositivo en el paciente.
La estenosis aórtica es un problema cardiaco cada vez más frecuente debido al aumento de la expectativa de vida. Se produce por un estrechamiento de la válvula aórtica del corazón ante un exceso de calcio depositado en la misma. Cuando la válvula se estrecha, no se abre correctamente, obligando al corazón a trabajar más para bombear la sangre a todo el cuerpo. En consecuencia, el corazón ve debilitadas sus funciones, lo que podría desencadenar una insuficiencia cardiaca y un mayor riesgo de muerte de origen cardiaco.
El sistema implantado en el HUCA reemplaza la válvula cardiaca dañada a través de un procedimiento mínimamente invasivo, sin tener que recurrir a una cirugía a corazón abierto. El dispositivo se inserta a través de una arteria de la pierna y es guiado mediante rayos X a través de las arterias hasta el corazón del paciente. Una vez alcanzado su destino, el dispositivo se expande y asume la función de la válvula original para favorecer el eficiente flujo de sangre rica en oxígeno desde el corazón.