Múnich, 25 ene (dpa) – El antiguo arzobispo de Múnich y Freising Friedrich Wetter se disculpó hoy por su «decisión equivocada» en un caso de abusos sexuales en la Iglesia católica alemana pero negó las acusaciones de haber tenido una conducta indebida en 21 casos.
«Lo siento de corazón», expresó el cardenal Wetter en un comunicado en referencia a uno de los casos ocurrido durante su mandato como arzobispo de Múnich de 1982 a 2008.
En concreto, un sacerdote que fue condenado judicialmente por abusos sexuales fue trasladado a otra parroquia en Garching an der Alz, al este de Múnich, donde volvió a ser acusado de abusar sexualmente de niños.
La disculpa formulada por Wetter se refiere a ese caso. El sacerdote en cuestión no debería haber seguido trabajando en la atención pastoral, indicó el cardenal en el comunicado.
Sin embargo, Wetter negó haber actuado de forma indebida en los 21 casos en los que es acusado de ello en un informe pericial presentado el pasado jueves por el bufete de abogados Westpfahl Spilker Wastl (WSW) y elaborado por encargo de la archidiócesis de Múnich y Freising.
«En seis casos no hubo abusos», sostuvo Wetter y agregó que uno de los nombres le era «completamente desconocido».
A su juicio, los hechos «no constituyen en modo alguno una prueba general de conducta indebida en 21 casos». No negó los casos, sino una mala conducta por su parte, señaló el abogado Martin Pusch en la presentación del informe pericial.
Tras la presentación del informe, los titulares estuvieron hasta ahora dominados por el papel de Joseph Ratzinger, ahora papa emérito Benedicto XVI.
Los expertos lo acusan de mala conducta en cuatro casos y de haber mentido. El papa emérito Benedicto admitió posteriormente haber ofrecido un testimonio incorrecto «por descuido».
El actual arzobispo de Múnich, el cardenal Reinhard Marx, también está acusado de conducta indebida en dos casos.
El informe de abusos presentado el jueves contabiliza al menos 497 víctimas. La mayoría de ellas eran niños y adolescentes varones que fueron objeto de agresiones sexuales entre 1945 y 2019.
Asimismo enumera por lo menos a 235 presuntos agresores, entre ellos 173 sacerdotes y nueve diáconos. Precisa que 40 clérigos retomaron la labor pastoral a pesar de las acusaciones de haber perpetrado o tolerado abusos, 18 de ellos incluso después de haber recibido «condenas relevantes».
En este sentido, la fiscalía de Múnich investiga 42 casos de conducta indebida de dignatarios de la Iglesia católica alemana relacionados con dicho informe.