Madrid/Barcelona, 27 oct (dpa) – El primer clásico en más de una década sin Lionel Messi ni Cristiano Ronaldo obliga a los habituales actores secundarios a ejercer un papel protagonista.
Los madridistas Gareth Bale y Karim Benzema y los barcelonistas Luis Suárez y Philippe Coutinho tienen prohibido esconderse mañana en el Camp Nou en un Barcelona-Real Madrid marcado por la ausencia de los dos astros que marcaron una época en el clásico del fútbol español.
Messi es el máximo goleador de la historia de los Barcelona-Real Madrid con 26 goles, pero los azulgrana no podrán contar mañana con su crack argentino por una lesión en el brazo derecho.
Cristiano Ronaldo, por su parte, abandonó esta temporada el Real Madrid para fichar por la Juventus. Antes, dejó su huella en los clásicos, anotando 18 goles y empatando en la segunda posición histórica con Alfredo di Stéfano.
Desde la llegada de Cristiano Ronaldo a la capital española en 2009, el portugués y el argentino fueron los dueños del show en los clásicos y dejaron en un segundo plano a sus escuderos. Pero estos tendrán que dar mañana la cara.
Se trata principalmente de dos jugadores por equipo. Benzema y Bale en el Real Madrid y Suárez y Coutinho en el Barcelona.
Benzema, de 30 años, llega muy discutido al Camp Nou tras un inicio de temporada en el que faltó muchísimo gol en la delantera del Real Madrid. Y todos, claro, miran al «9».
«Sé que tengo que hacer más goles. Lo tengo en mi cabeza», dijo el martes tras marcar ante el Viktoria Plzen en Champions su sexto gol de la temporada. «Este gol me da mucha motivación y voy a trabajar para meter más».
El francés ha cuajado muy buenos partidos ante el Barcelona -algunos de ellos en el Camp Nou- y mañana será el máximo goleador de los presentes en los clásicos. Le ha marcado nueve goles al Barcelona.
Bale tampoco ha escapado de la crítica y el escenario de mañana es ideal para que dé el paso que se le pide. El galés de 29 años, que lleva cuatro goles este curso, tiene el reto de ocupar el enorme hueco que dejó Cristiano Ronaldo.
A su favor está que el británico parece un jugador «tocado» que deja maravillas en los partidos importantes. Ante el Barcelona, en la final de la Copa del Rey de 2014, marcó su primer gran gol como jugador blanco.
El Real Madrid está todavía buscando su lugar sin los goles de Cristiano Ronaldo y el futuro de su técnico, Julen Lopetegui, pende de un hilo. Se da por hecho que una derrota mañana provocará su despido inmediato.
En el Barcelona, Ernesto Valverde parece tener su puesto asegurado pase lo que pase. Los azulgrana superaron el miércoles su primer test sin Messi -ganaron 2-0 al Inter de Milán-, pero mañana será una prueba de mucho mayor nivel.
Suárez, el mejor socio de Messi dentro y fuera del campo, lleva este año sólo cuatro goles en 13 partidos y apenas uno en sus últimos ocho encuentros. Algunos medios aseguran que el uruguayo de 31 años no está en su mejor momento físico.
Con el argentino al lado resolviendo los problemas todo es más fácil, pero mañana será Suárez la principal referencia ofensiva del Barcelona, el «hombre gol» de los de Valverde.
Coutinho llegó al Barcelona en enero de este año y sólo ha jugado un clásico. Estuvo apenas 45 minutos sobre el césped del Camp Nou en el 2-2 que firmaron azulgranas y blancos en mayo.
Esta temporada se ha convertido en uno de los fijos de Valverde y está cumpliendo su cometido: generar fútbol, desbordar, asistir (lleva 3 pases de gol) y marcar (acumula cuatro).
Pero en ausencia de Messi se le exigirá más. Y es que las sombras del argentino y de Cristiano Ronaldo son demasiado alargadas. Aunque no jueguen, mañana estarán muy presentes en el clásico.
Por Ignacio Encabo (dpa)