Houston/Texas (EE.UU.) 21 jul (dpa) – Una delegación del campeón de la Bundesliga encabezada por el presidente del club, Karl-Heinz Rummenigge, visitó el «Spring Branch Boys & Girls Club» en Houston, unas horas antes de que se disputara el partido de prueba contra el Real Madrid.
El Bayern Múnich acudió para apoyar en Houston, la cuarta ciudad más grande de Estados Unidos, un proyecto social del jugador de fútbol americano DeAndre Hopkins.
El programa «Freekicks Soccer» también forma parte de la campaña de Houston para convertirse en una de las diez sedes de la Copa Mundial de la FIFA 2026 que se disputará en Estados Unidos, Canadá y México.
«Creo que la iniciativa de DeAndre Hopkins es fantástica. Fundó el club Boys & Girls en Houston. Los niños pasan gran parte de su tiempo aquí en la escuela donde se les imparten clases y juegan al fútbol por las tardes. Esto me parece estupendo. Nosotros apoyamos este proyecto», indicó Rummenigge durante su visita a la escuela.
Hopkins, de 27 años, que juega como receptor en el equipo Houston Texans de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL), informó que de niño hubiera preferido ser futbolista.
«Todavía me apasiona el fútbol», confesó Hopkins. El deportista profesional, muy bien pagado, quiere dar a los niños de familias socialmente desfavorecidas la oportunidad de jugar al fútbol. Los niños tienen entre siete y doce años.
Con su compromiso, el club bávaro quiere contribuir a que, dentro de siete años, también se disputen en la ciudad de Houston los partidos del mundial de fútbol. Estados Unidos propuso 17 ciudades.
«En este sentido, también estamos tratando de apoyar a Houston», recalcó Rummenigge. El alcalde, Sylvester Turner, agradeció al club alemán este apoyo.