OVIEDO, 4 Oct. (EUROPA PRESS) La constructora Dolabay tendrá que pagar 2,1 millones de euros al Ayuntamiento de Corvera, los correspondientes al aval de garantía depositado en su día, por no completar las obras de urbanización del área de Los Balagares. Una sentencia de la sala número dos de lo Contencioso-Administrativo de Oviedo ha determinado que los trabajos deberían haberse completado en una única fase, al contrario de lo que defiende la empresa.
En una nota de prensa, el Ayuntamiento de Corvera informa de este fallo judicial. La promotora, según explica el Consistorio, defendía que las obras de urbanización podían realizarse por fases al igual que habían hecho con la construcción de viviendas y, por tanto, la empresa no estaba obligada a garantizar toda la urbanización. Por el contrario, el Ayuntamiento defendía que estas obras debían llevarse a cabo en una única fase por lo que Dolabay estaría obligada a subsanar las deficiencias existentes y completar las actuaciones necesarias para que la urbanización contase con todos los servicios necesarios, tal y como también habían exigido los vecinos.
Ahora, la sentencia del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº2 de Oviedo da la razón al Ayuntamiento en su tesis y asegura que «lo cierto es que el proyecto preveía la urbanización al completo y en una única fase y por tanto esta exigencia es ajustada a derecho», señala la nota municipal.
«La sentencia da la razón al Ayuntamiento cuando decíamos que se tenía que haber urbanizado todo de una manera única: Calles, viales, saneamiento, iluminación, zonas verdes etc* y luego si la empresa quería construir las viviendas por fases podía hacerlo pero con la zona ya completamente urbanizada», señaló al respecto Iván Fernández, alcalde de Corvera.
El primer edil se mostró «satisfecho» con esta sentencia y añadió: «Seguramente recurrirán pero todo indica que la justicia nos dará la razón y con ese dinero haremos las tareas que están pendientes», entre las que se encuentran «la construcción del aliviadero, completar la red de saneamiento y mejora de zonas verdes y viales». Fernández puntualizó en este sentido: «Demostramos con hechos que defendemos el interés general del concejo y la justicia nos da la razón en nuestra forma de actuar», y concluyó afirmando que «con este Gobierno, las empresas por muy grandes y poderosas que sean pagaran lo que deben».
«No se tenía que haber permitido a la promotora urbanizar por fases, porque al final pasa lo que ha pasado, que es que han dejado las cosas a medias con un montón de vecinos viviendo allí», se lamentó Iván Fernández. La propia sentencia dice que «no se debe confundir que la construcción de las viviendas pudiera ser por fases con que la construcción de la urbanización tuviera que ser en una fase única, tal y como refleja el proyecto de urbanización aprobado en 2004». «Ahí esta el origen de todos los males, si no se hubiera permitido a la promotora actuar sin cumplir sus obligaciones ahora no estaríamos así», señaló el alcalde, quién recordó que en 2004 gobernaba el PP y la USPC en el Ayuntamiento de Corvera. El alcalde se apoya en que hasta la propia sentencia dice «que la actuación del Ayuntamiento en esa época fue excesivamente permisiva con la promotora».
Dolabay, además de no estar de acuerdo con hacer las obras pendientes, aseguraba que la valoración de estas obras pendientes realizada por la Oficina Técnica Municipal era errónea. La sentencia concluye que no tienen razón y que esta valoración «se ajusta a la realidad de las obras pendientes», según el primer edil.