Fráncfort, 10 ago (dpa) – El ex ciclista alemán Jan Ullrich, ganador del Tour de Francia de 1997, fue detenido hoy tras agredir presuntamente a una prostituta en un hotel de lujo de Fráncfort, confirmó una portavoz de la Policía de la ciudad alemana.
El deportista fue arrestado provisionalmente alrededor de las 6 de la mañana «tras un violento enfrentamiento», indicó la portavoz. Mientras, el abogado de Ullrich, Wolfgang Hoppe, no ha querido hacer declaración alguna al respecto por el momento al ser preguntado por dpa.
De acuerdo con el comunicado emitido por la Policía alemana, «se detuvo provisionalmente a un huésped de 44 años tras un enfrentamiento violento. Anteriormente, el huésped había tenido una disputa con una dama de compañía que se quedaba con él.
«Posteriormente éste atacó a la mujer físicamente y la hirió. Las circunstancias exactas que rodean al hecho están siendo investigadas actualmente», explicaron en el comunicado. «La víctima herida tuvo que recibir atención médica», agregaron.
Tanto la Fiscalía como la Policía declararon explícitamente que el huésped del hotel de 44 años era Jan Ullrich e indicaron que el personal llamó a las autoridades a pedido de la mujer, que según la Fiscalía, fue estrangulada.
La víctima ya ha sido interrogada, declararon. Sin embargo, Ullrich no pudo contestar a las preguntas. «Se encontraba bajo la influencia del alcohol y las drogas», declaron las portavoces de la Policía y la Fiscalía.
Con el interrogatorio, la Policía quiere «refutar o concretar la acusación», según sus propias declaraciones. De acuerdo con la Fiscalía de Frankfurt, se trataría de intento de homicidio y lesiones corporales graves.
La detención llega unos días después de que Ullrich fuera detenido por la Policía española tras asaltar la casa de su compatriota, el actor y director de cine Til Schweiger, en la isla de Mallorca.
Ullrich quedó en libertad al día siguiente tras prestar declaración ante el juzgado de Palma, pero pesa sobre él una orden de alejamiento de 50 metros sobre su vecino Schweiger.
Tras el incidente, el ex ciclista afirmó estar arrepentido y querer someterse a terapia para solucionar sus problemas desde que su mujer Sara le abandonara llevándose a sus tres hijos de once, nueve y cinco años a Alemania.
«Por amor a mis hijos ahora sigo una terapia. La separación de Sara y la distancia con mis hijos, que no he visto desde Semana Santa y con los que apenas he hablado, me ha afectado mucho. Como consecuencia hice y tomé cosas de las que me arrepiento mucho», declaró en una entrevista publicada esta semana en el diario alemán «Bild». Sin embargo, según el rotativo, el ex ciclista de 44 años niega ser adicto a ninguna droga.
Según informó este rotativo unos días después, Ullrich habría hablado con sus hijos por teléfono y su abogado Hoppe indicó que había reservado ya hace un tiempo una plaza para Ullrich en una clínica en Alemania.