La Guardia Civil ha desarticulado un grupo que suministraba armas a organizaciones dedicadas al narcotráfico, en una operación en Málaga y Granada en la que ha detenido a 16 personas y practicado 12 registros para requisar 14 rifles tácticos del calibre 300 blackout.
Según explicó la Benemérita, el grupo adquiría las armas a través de testaferros con licencia de armas en vigor para posteriormente desviarlas al mercado negro, donde las compraban organizaciones dedicadas al tráfico de drogas por un precio que triplicaba su valor de compra en el mercado legal. En tres de los registros en Málaga y Granada se descubrió además que las viviendas habían sido transformadas en plantaciones de interior de marihuana.
La llamada ‘Operación Brutale’ comenzó al detectar la Intervención de Armas de la Guardia Civil de Málaga transacciones sospechosas en la compra de varias armas nuevas. Avisó al Servicio de Información de la Guardia Civil para investigarlo y la operación resultó en la intervención de 14 armas tácticas, abundante munición y 13.000 euros en metálico. Algunos de los rifles estaban escondidos en dobles fondos que han dificultado su localización.
De los 16 detenidos, dos lo fueron en el Aeropuerto de Madrid cuando regresaban al extranjero. Todos han sido puestos a disposición judicial por delitos de organización criminal, tráfico de armas y contra la salud pública.
La operación ha sido llevada a cabo por agentes de la Guardia Civil de Málaga de manera conjunta con la Jefatura de Información, con el apoyo de guardias civiles de Granada, el Grupo de Acción Rápida, el Grupo de Reserva y Seguridad de Sevilla y el Servicio Cinológico de Madrid, con perros especializados en la detección de armas.