Un total de 102.666 estudiantes de Infantil, Primaria, Secundaria (ESO) y Bachillerato –un 1% menos que hace un año- han iniciado en Asturias el curso escolar, marcado por la puesta en marcha de la nueva ley educativa, la LOMLOE. Además, la Consejería de Educación ha implantado por primera vez un calendario lectivo unificado para el regreso a las aulas, propiciado por la supresión de los exámenes de septiembre en la ESO.
La matrícula de Secundaria y Bachillerato asciende a 42.787 estudiantes, lo que supone un ligero -aunque significativo- incremento de 784 alumnos (1,9%) respecto al curso anterior. En la enseñanza pública se ha registrado 32.571 matriculaciones, mientras que las 10.216 restantes corresponden a la privada concertada. Gijón es el concejo con más estudiantes en estas etapas, con 12.144, seguido por Oviedo, con 9.741; Avilés, con 3.969; la comarca del Nalón, con 2.896, y la comarca del Caudal, con 2.136.
Infantil y Primaria cuentan con 59.879 alumnos y alumnas. En números absolutos, son 1.813 menos que el curso pasado, lo que supone un descenso del 3%. No obstante, se trata de un porcentaje menor que el registrado hace dos cursos (2021-2022), cuando se situó en el 3,5%. En la red pública se contabilizan 42.631 matrículas y las 17.248 restantes, en la privada concertada.
Gijón también es el concejo con más estudiantes en Infantil y Primaria, con 15.889; seguido de Oviedo, con 14.150; Avilés, con 5.294; la comarca del Nalón, con 3.790, y la comarca del Caudal, con 3.003.
En cuanto a la escuela rural, la suma de los colegios rurales agrupados (CRA) y de los centros públicos de educación básica (CPEB) alcanza las 2.602 matrículas, tan solo 6 menos que el curso anterior. En concreto, en los CRA se han inscrito 1.730 alumnos y alumnas, un 3,14% menos que en el periodo 2021-2022. Por su parte, en los CPEB la matrícula asciende a 872 estudiantes, un 5,8% más. Cabe recordar que en ese curso 2021-2022 se había producido en los CPEB una pérdida del 15,5% del alumnado.
Educación mantiene unidades abiertas con 4 estudiantes y hasta con 3 de manera excepcional. Además, las plazas docentes de los CRA forman parte del listado de puestos de difícil desempeño, con el objetivo de estabilizar y fijar plantilla en la zona rural.
Los datos de matriculación del nuevo curso mejoran las previsiones iniciales que manejaba la consejería, que estimaba un descenso del 3,4% en Infantil y Primaria y un incremento del 1,1% en Secundaria.
La evolución del alumnado tiene su reflejo en el número de unidades en funcionamiento por cada etapa. De este modo, la pérdida de 1.813 estudiantes en Infantil y Primaria ha supuesto la supresión de 27 y 21 clases, respectivamente, en estos ciclos. En cambio, el incremento de 784 estudiantes en ESO y Bachillerato ha implicado la apertura de 21 unidades más.
La planificación de Educación se ajusta a las necesidades de los centros mediante un análisis caso a caso. Como planteamiento general, nunca se cierra una unidad si hay posibilidad de mantenerla, si bien tampoco puede mantener abiertas unidades que carezcan de alumnado.
En cuanto a la dotación de personal para la red pública, la plantilla orgánica aprobada en marzo asciende a 9.448 docentes, lo que supone un incremento de 81 plazas en relación con el curso pasado. Las cifras fueron negociadas con los sindicatos de la enseñanza.
Por otra parte, Asturias es la quinta comunidad con mayor gasto por estudiante. El último dato oficial disponible –correspondiente a 2019- lo cifra en 7.381 euros, lo que equivale a 828 euros más que en 2014.