(dpa) – La tecnología Keyless-Go permite a sus usuarios acceder a los sistemas de su coche de forma remota. Esta función, que también permite abrir y arrancar el automóvil sin llave, es sin lugar a duda muy cómoda, pero crea una brecha de seguridad que los ladrones de coches pueden aprovechar interceptando las señales de radio.
Según informa la revista especializada alemana «Auto, Motor und Sport», hay trucos para protegerse de ellos, y uno es blindar la llave.
Los redactores de la publicación explican que, en cuanto alguien pulsa la manilla de la puerta de un coche equipado con Keyless-Go, el sistema envía una señal a la llave, y, si la llave está cerca, se abre la puerta. Del mismo modo se produce el intercambio de señales que permiten arrancar el motor.
Sin embargo, si la llave está colgada en el tablero de casa, la distancia hasta el coche es demasiado grande. Por eso, los ladrones utilizan extensores de alcance de radio especiales con los que captan la señal de la llave y la envían al coche. Los delincuentes se colocan contra las paredes de la casa o las puertas y captan la señal de la llave mientras un cómplice activa la manilla de la puerta del coche.
Para evitarlo, algunas llaves de coche pueden desconectarse. Esto significa que la llave no emite ninguna señal al tirar de la manilla de la puerta. Dependiendo del modelo, esto puede hacerse en la llave misma o a través del menú de control del coche; en pocos casos se requiere la ayuda de un taller especializado. En algunas llaves se pueden instalar sensores de movimiento que desconectan las llaves que no se mueven al cabo de cierto tiempo.
También hay soluciones caseras muy útiles: «Auto, Motor und Sport» aconseja envolver las llaves a distancia en papel de aluminio o guardarlas en el frigorífico, cuyas paredes de acero son lo bastante gruesas como para impedir que se intercepte la señal.
Una olla también evita el robo del coche: «Si las paredes de acero son lo bastante gruesas y la tapa no es de cristal, la llave puede pasar la noche en ella», aconsejan los expertos. Mientras que las bolsas especiales para llaves también evitan los ataques, las latas de galletas no son adecuadas para este fin, ya que las paredes de hojalata son demasiado finas.
Los conductores cuyos coches ya están equipados con tecnología de banda ultraancha (UWB) llevan a bordo un sistema antirrobo relativamente seguro. El chip UWB mide la distancia que recorren las señales entre el coche y la llave y, por lo tanto, hace imposible la intercepción de la señal con ayuda de extensores de alcance por radio. Sin embargo, según la revista especializada, solo algunos modelos muy actuales están equipados con UWB.