En el ámbito fiscal español, las declaraciones tributarias son documentos de vital importancia que deben ser presentados por distintos tipos de contribuyentes. En este aspecto, dos de los modelos más relevantes son el Modelo 115 y el Modelo 347, los cuales cumplen funciones esenciales para el sistema tributario.
En España, existen diversos tipos de declaraciones que se deben realizar, cada una con diferentes objetivos y requisitos. Estas declaraciones son presentadas por distintas personas, ya sean habitantes comunes del país, empresas o autónomos, con el fin de facilitar los diversos procesos relacionados con la organización fiscal.
Entre los tipos de declaraciones más populares e importantes en su función, se encuentran el Modelo 115 y el Modelo 347. Ambos modelos son esenciales para distintas áreas del sistema tributario, permitiendo al Estado mantener un control eficiente de las obligaciones tributarias. Si deseas entender qué son estos modelos, para qué sirven y cómo se rellenan, en este artículo encontrarás todos los datos necesarios.
Modelo 115
El Modelo 115 es una declaración que deben presentar los arrendadores de inmuebles urbanos. Este modelo es utilizado para declarar e ingresar las retenciones que practican los inquilinos. Por lo tanto, la correcta presentación de este modelo es fundamental para mantener la transparencia fiscal.
Para cumplir con ello, es crucial conocer cómo rellenar el modelo 115. Generalmente, no se trata de una tarea complicada, pero requiere atención y precisión al ingresar los datos que se requieren. En ellos, se incluye el NIF del arrendador, el importe total de las rentas percibidas, el importe total de las retenciones practicadas y los datos identificativos del inquilino.
Por otro lado, es importante destacar que no importa si eres una persona física, una empresa o un autónomo, si recibes ingresos por el alquiler de tus inmuebles, estás obligado a presentar la declaración del Modelo 115 para evitar cualquier tipo de complicación legal.
Asimismo, la frecuencia de presentación del Modelo 115 es trimestral, lo que significa que se debe presentar cada tres meses, dentro de los plazos establecidos por la Agencia Tributaria. Normalmente, estos plazos son en enero para el cuarto trimestre del año anterior, en abril para el primer trimestre, en julio para el segundo trimestre y en octubre para el tercer trimestre.
Gracias a este proceso, la Agencia Tributaria puede mantener un control adecuado sobre las retenciones practicadas a los inquilinos y garantizar que dichas retenciones se ingresen correctamente a la recaudación fiscal. Además, es una herramienta que facilita a los arrendadores cumplir organizada y eficientemente con sus obligaciones tributarias.
Modelo 347
Para los contribuyentes en España, ¿qué es el modelo 347? Suele ser una pregunta bastante habitual. Este modelo es una declaración informativa que deben presentar todas aquellas personas físicas y jurídicas que realicen operaciones con terceros superando el monto de 3.005,06 euros a lo largo del año.
Este modelo es esencial para la Agencia Tributaria, pues les permite obtener información detallada sobre las operaciones económicas realizadas por los contribuyentes, manteniendo así un control más efectivo de la economía y facilitando la detección de posibles irregularidades.
Para rellenar el Modelo 347, es necesario incluir una serie de datos específicos. Entre ellos se encuentran los datos identificativos del declarante, el NIF y nombre de los terceros con los que se han realizado operaciones, así como también el importe total de las operaciones realizadas con cada uno de ellos.
Además, no importa el tipo de actividad económica que realices, si superas el límite de 3.005,06 en operaciones con un mismo tercero durante el año, te encuentras obligado a presentar esta declaración informativa. Esto incluye tanto a grandes empresas como a Pymes y autónomos, asegurando que todos cumplan con sus obligaciones fiscales.
Finalmente, la frecuencia de presentación del Modelo 347 es anual y, usualmente, debe ser presentada durante el mes de febrero del año siguiente al que corresponden las operaciones declaradas.
Asimismo, es importante estar atento a los plazos para evitar retrasos en la presentación, pues el incumplimiento de las obligaciones fiscales puede traer sanciones.