(EP) – La Dirección Desconcentrada de Cultura de Cusco ha anunciado la suspensión de las visitas turísticas a la ciudadela incaica de Machu Picchu debido a la inestabilidad política vinculada a las protestas contra la presidenta Dina Boluarte.
La medida busca preservar el patrimonio histórico, ya que el distrito inició un paro indefinido desde este sábado, 21 de enero. Quienes hayan adquirido ya las entradas podrán utilizarlas hasta un mes después de que terminen las protestas y se darán facilidades para la devolución de lo ya abonado.
El Frente de Defensa de los Intereses de Machu Picchu, convocante del paro indefinido, ha anunciado el cierre de todos los locales comerciales de la zona para exigir la renuncia de la presidenta Dina Boluarte y ha constituido una olla común para todo el distrito para hacer frente al desabastecimiento de alimentos.
En los últimos días se han producido enfrentamientos violentos en el distrito de Ollantaytambo, donde se encuentra la estación de tren que lleva a Machu Picchu.
Más de 2.000 turistas visitaban cada día Machu Picchu antes de las protestas, mientras que la cifra se ha reducido a unos 500, lo que supone un enorme daño para la economía de la región.