La instalación de césped artificial ha crecido en la última década más de lo que lo había hecho en los años anteriores. No solo por parte de los particulares para sus jardines, sino por parte de diseñadores, empresas y hasta Ayuntamientos. Prueba de ello es el uso de este material en jardines públicos o por clubes de fútbol de primer nivel, la próxima instalación en campeonatos de tenis de talla mundial y la creación incentivos por introducir el césped artificial en campos de golf.
Se trata, inequívocamente, de un pavimento pensado para ahrorar dinero tanto a particulares como a la Administración dado su respeto por el medio ambiente y el ahorro que supone de agua y de dinero.
¿Qué es lo que ha conseguido que la hierba artificial sea tan demandada en los últimos años?
Todo se lo debe a su innovación tecnológica desde finales de los años 90. Aquella superficie errática, frágil, de tacto poco agradable, aspecto tosco y poco amable con las articulaciones se ha convertido en un pavimento que emula a la perfección al césped natural a excepción de su olor.
Además, la versatilidad de esta superficie no solo permite que se instale en exteriores, también se puede ver en jardines verticales, y hasta en interiores como parte de las paredes y techos, o como zonas acotadas para mascotas y para los más pequeños.
Todo, gracias a su facilidad de instalación y a su capacidad aislante. Añadidos bastante bien valorados hasta en proyectos de decoración, según indica Global Césped, empresa especialista en la venta e instalación de Césped Artificial en Madrid.
Ventajas del césped artificial
Aunque muchas de las bondades de esta superficie se achacan a la innovación, lo cierto es que no solo se limitan a su durabilidad.
- El jardín o espacio en el que se instala siempre estará verde.
- Apariencia y tacto similar al césped natural.
- Es económico. Tras una mayor inversión inicial, los costes de mantenimiento, agua, herbicidas, etc. Son marginales respecto a la variante natural.
- Se precisa menos de un quinto del agua usada para mantener el césped natural.
- No necesita sol y agua para mantenerse en buenas condiciones.
- Buen drenaje, por lo que es ideal para el contorno de la piscina.
- No atrae insectos y es hipoalérgico, por lo que es agradable y seguro para los niños y las mascotas.
- El césped artificial de calidad no mancha.
- Respeta el medioambiente y es ignífugo.
- Soporta altas y bajas temperaturas sin problemas.
- Posee alta durabilidad, es de fácil instalación y combinable con las tarimas sintéticas exteriores.
Claves para mantener en buen estado la hierba artificial
Basta con repetir tres sencillos pasos de manera espaciada, ya sea quincenal o mensualmente en los meses más calurosos.
Refrescar el césped artificial con un poco de agua para bajar la temperatura de la superficie en periodos estivales.
Cepillado de las hebras tras regrescarlo para conservar su aspecto reluciente. Se puede realizar con un rastrillo.
Vigilancia periódica más dilatada para eliminar hierbas naturales, hongos y malas hierbas bajo la instalación.
Asimismo, es posible contar con ayuda profesional para su mantenimiento, puesto que empresas especialistas como Global Césped ofrecen no solo garantía de instalación, sino un servicio posventa orientado al mantenimiento.