¿Por qué se siguen instalando bañeras en las obras de nueva construcción, cuando realmente el uso que habitualmente le damos es el de una ducha lo más rápida posible?
En respuesta a esta pregunta nace cambiar bañera por ducha , la empresa madrileña que sustituye más de 1.000 bañeras al año por cómodos platos de ducha.
Entre las reformas más habituales que se realizan en los hogares españoles según nos cuentan los responsables de esta empresa, el cambio de bañera por ducha es el más habitual.
Los motivos por los cuales se recurre constantemente a este tipo de reformas son de lo más lógico: el poco tiempo del que disponemos habitualmente, el ahorro en los suministros de agua, gas y electricidad y en el caso de las personas de avanzada edad o movilidad reducida, disponer de una práctica ducha sin barreras es toda una alegría diaria.
Además el mantenimiento de una ducha es mucho más fácil y se emplea menos tiempo.
Actualmente hay una amplia oferta en diseños de platos de ducha, acabados, materiales y dimensiones que permiten adaptarse a todos los gustos, necesidades y tendencias de cada hogar.
Los platos de ducha pueden ocupar el mismo espacio, incluso menos, que el de la antigua bañera permitiendo disfrutar del espacio restante sin la barrera de la bañera, ampliando esos minúsculos cuartos de baño en los que resulta complicado moverse.
También son posibles las instalaciones de platos de ducha super reducidos, de forma cuadrada y optimizar más todavía el espacio disponible incorporando algún mueble auxiliar en la parte que queda libre.
En cuanto al diseño, se pueden conseguir un gran número de acabados diferentes combinando los diferentes diseños, colores y materiales del plato de ducha, los azulejos de la pared y las mamparas.
Es la mejor forma de cambiar la imagen del cuarto de aseo, renovándolo a la vez que se hace más funcional y práctico.