Gerlingen (Alemania), 23 mar (dpa) – La empresa alemana de tecnología Bosch está preparando sus fábricas para el nuevo estándar de telefonía móvil 5G, según informó la compañía.
«Creemos que el 5G llegará antes de lo que muchos creen», dijo a dpa el gerente del sector industrial de Bosch, Rolf Najork, en vísperas de la Feria de Hannover, la feria industrial más importante del mundo. «El tren del mercado es muy fuerte».
El martes se inició la subasta de frecuencias para este nuevo estándar de telefonía móvil. El presidente de la Agencia Federal de Redes de Telecomunicación, Jochen Homann, subrayó la importancia del 5G para la industria.
En el marco de la integración en red de máquinas y aparatos también en la producción, las empresas dependen de redes rápidas de transmisión de datos también en la telefonía móvil, señaló.
Por eso, Bosch no quiere esperar: «Ya estamos preparando nuestros productos para el 5G. Se trata de robots, máquinas y controles de máquinas», indicó Najork. «Lo estamos haciendo a gran velocidad».
En otoño (boreal) se presentará a los clientes la nueva tecnología de automatización compatible con 5G. «En el transcurso del año, probaremos el 5G en diferentes plantas de Bosch».
En los últimos tiempos, se discutió si también empresas chinas como Huawei deberían participar en la construcción de la red 5G. La preocupación es que a través de esta tecnología se pueda interceptar información.
Estados Unidos advirtió hace poco que los servicios secretos no podrían intercambiar más información si Huawei y otras empresas chinas participan en la construcción de la red 5G en Alemania.
Desde Bosch, se le quitó importancia al asunto: «Lógicamente seguimos de cerca el debate en torno a Huawei. Pero para todos los que se están equipando con esta red y todos los proveedores de tecnología valen las mismas disposiciones en materia de seguridad, independientemente del país de origen».
Igual de importante, según Najork, es que por fin se determinan estándares comunes para la comunicación entre máquinas. Sin un lenguaje común, por ejemplo, no es posible el intercambio de datos entre proveedores y productores, añadió. «Necesitamos estándares en la automatización. De lo contrario, no podremos dar el próximo paso en la industia 4.0».
La última facturación el sector industrial de Bosch volvió a aumentar y se situó en los 7.400 millones de euros (unos 8.300 millones de dólares), lo que supone el diez por ciento de la facturación total del grupo.