Berlín, 8 ene (dpa) – Alemania confirmó hoy que entre el millar de hombres que participaron en la oleada de agresiones en masa a mujeres en Nochevieja en Colonia, en el oeste del país, se encuentran al menos 18 refugiados.
La Policía federal alemana investiga a 31 sospechosos de los que se conoce el nombre y entre los que se encuentran también refugiados, declaró hoy un portavoz del Ministerio de Interior en base a un informe de la Policía.
En concreto entre los 31 sospechosos se encuentran nueve argelinos, ocho marroquíes, cinco iraníes, cuatro sirios, un iraquí, un serbio, un estadounidense y dos alemanes. De ellos, 18 son refugiados, informó el portavoz.
Sin embargo, se trata de delitos de agresión física y robos. De momento, no se ha podido relacionar a ningún solicitante de asilo con delitos sexuales, detalló.
La Policía federal, encargada de la vigilancia en la estación central de trenes de Colonia, recibió también tres denuncias de delitos sexuales, informó el portavoz. No obstante, para estos casos no tienen sospechosos de momento, agregó.
Asimismo, en el marco de las investigaciones las autoridades alemanas detuvieron hoy a dos sospechosos de 16 y 23 años de Marruecos y Túnez respectivamente y se incautaron de sus móviles. Los dos detenidos fueron puestos de nuevo en libertad después de no poder confirmarse las sospechas, informó el fiscal Benedikt Kortz a dpa.
Según informaron la emisora WDR y el diario «Kölner Stadt-Anzeiger», en los teléfonos de los sospechosos se encontraron videos en los que se veían agresiones a mujeres, pero el fiscal no quiso hacer comentario alguno al respecto.
De acuerdo con la revista alemana «Der Spiegel», los investigadores de Colonia han encontrado algunos de los teléfonos robados en centros de refugiados o en sus proximidades.
En medio de un intenso debate sobre lo sucedido hace una semana, la canciller alemana, Angela Merkel, reclamó hoy de nuevo que se llegue al fondo de lo sucedido antes de acordar cualquier medida y aseguró que los atacantes deberán hacer frente a todo el peso de la ley y del Estado.
«Para la canciller alemana es importante que primero se ponga sobre la mesa la verdad completa sin que se oculte o disimule nada», subrayó el viceportavoz del Gobierno alemán, Georg Streiter.
«Cualquier otra cosa daña el Estado de Derecho y a la gran mayoría de refugiados sin antecedentes penales que buscan protección entre nosotros», declaró.
Por su parte, el vicecanciller alemán y jefe del Partido Socialdemócrata (SPD), Sigmar Gabriel, reclamó mano dura del Estado contra los que infringieron la ley alemana y abogó por que los criminales extranjeros cumplan las penas en sus países de origen.
Se debe analizar cómo se puede hacer de nuevo realidad el principio «Prisión en sus países de origen», indicó al diario «Bild». «¿Por qué deben los contribuyentes alemanes pagar las estancias en prisión de los criminales extranjeros?», se preguntó el socio de la canciller Angela Merkel. La amenaza de acabar tras las rejas en sus países les asusta mucho más que pasar un tiempo en una cárcel alemana, agregó.
En su opinión, en conjunto debe agilizarse el proceso de deportaciones. Si los Estados, como los africanos, se niegan a aceptar de vuelta a los solicitantes de asilo, entonces Alemania les deberá dar a elegir: «O asumen la responsabilidad de sus ciudadanos o reduciremos la ayuda al desarrollo», indicó.
En total cerca de 1.000 hombres de apariencia árabe o norteafricana con edades comprendidas entre los 18 y 35 años, «en fuerte estado de embriaguez» y divididos en pequeños grupos, cercaron a las mujeres, las acosaron y les robaron en la plaza delante de la estación central de trenes de Colonia la última noche de 2015. Hasta el momento se han presentado 170 denuncias en la Policía.
La Policía tiene 350 horas de material videográfico y cerca de 250 dispositivos de almacenamiento que aún deben ser analizados, informó a dpa un portavoz. Para agilizar las investigaciones se ha incrementado hasta 100 el número de agentes que conforman el grupo de investigación «Año nuevo».