Leverkusen (Alemania), 29 oct (dpa) – A pesar de llevar poco tiempo al frente de la farmacéutica Bayer, Werner Baumann ya atesora algunos hitos importantes: no sólo le dio prioridad a la compra de la fabricante de semillas Monsanto, sino que logró adquirir la empresa estadounidense. Ahora, sin embargo, necesita un poco de paciencia.
A continuación, una serie de preguntas y respuestas en relación con la adquisición de Monsanto por parte de Bayer.
– ¿Puede paralizarse todavía la fusión?
En realidad, sí. A pesar de que las dos empresas ya la acordaron hace unas semanas, no se trata de un acuerdo definitivo. La paralización se produciría si los accionistas de Monsanto ejerciesen su derecho de veto, aunque esta es una posibilidad que a estas alturas parece poco probable.
Lo que todavía no está claro es qué postura adoptarán las autoridades responsables en Estados Unidos en materia de Competencia tras analizar la compra de la fabricante de semillas por parte de la empresa alemana. Previsiblemente, este organismo impondrá algún tipo de condiciones a Bayer. Además, no se descarta totalmente que se pueda prohibir la fusión de ambas compañías.
-¿Cómo puede convencer Bayer a las autoridades de defensa de la Competencia de la idoneidad de la compra?
Desde el inicio, la directiva de la empresa alemana insistió en los puntos positivos del acuerdo empresarial, señalando que las compañías no se solapaban. «Queremos ayudar a producir la suficiente cantidad de alimentos seguros, sanos y asequibles», dijo el presidente de Bayer, Werner Baumann, durante la presentación de las cuentas trimestrales de la compañía esta semana.
Este aspecto facilitaría que las autoridades de la competencia autorizasen la operación. Estratégicamente, la compra de Monsanto es coumprensible, otra cuestión es si el precio pactado es adecuado y si la imagen negativa de Monsanto perjudicará a Bayer.
– ¿Qué pasaría si las autoridades responsables en materia de Competencia no autorizan la adquisición?
Entonces, Bayer tendría que asumir el mayor fallo de toda su historia y el caso constituiría todo un escándalo para Baumann, quien se vería en una posición muy débil. Además, habría que sumar el desembolso de 2.000 millones de Bayer a Monsanto.
– ¿Cuáles son los siguientes pasos a seguir?
En una asamblea general, los accionistas de Monsanto deben dar luz verde a la adquisición. La fecha de dicha reunión todavía no ha sido fijada pero se espera que tenga lugar a finales de este año o a principios de 2017. Ambas empresas están convencidas de que los inversores emitirán un voto positivo.
– ¿Los accionistas de Bayer también deben votar?
No, el Consejo de Vigilancia de la empresa alemana, en representación de los accionistas, ya dio su visto bueno a la compra. En la asamblea general de la compañía se espera que haya críticas a la gestión pero ninguna rebelión.
Ésta la llevarán previsiblemente a cabo tanto activistas medioambientales como representantes de los agricultores y colectivos ciudadanos que han convocado protestas masivas de cara a la celebración de la asamblea general de Bayer prevista para el 28 de abril de 2017.
-¿Cuándo se puede dar el acuerdo por finalizado?
Bayer espera que a finales de 2017 el acuerdo esté ya finiquitado. Antes, la empresa alemana debe esperar los veredictos tanto de autoridades de la Competencia estadounidense como europea. Además, sobre el caso deben también pronunciarse más 30 organismos de defensa de la Competencia, según indicaron expertos en la materia.
Por Peter Lessmann