El presidente del Principado, Adrián Barbón, ha pedido “verdad, justicia y reparación” para las víctimas de la represión, porque “se merecen saber, recibir un trato justo y obtener una compensación, cuando menos cierto alivio, por el sufrimiento acumulado”.
En Grado, donde se ha celebrado el acto institucional del Día de la Memoria Democrática en Asturias y la entrega de diplomas de anulación de sanciones y reconocimiento a los 54 cargos políticos y empleados públicos represaliados durante la guerra civil y la dictadura, el presidente ha subrayado el compromiso de su gobierno contra la desmemoria: “Tenemos la obligación moral de poner todos los medios para descubrir lo que realmente ocurrió durante la guerra civil y la dictadura. Confíen en mí cuando les digo que mi gobierno está comprometido con estos objetivos, que creemos en ellos y los asumimos como un auténtico deber moral”, ha asegurado.
El jefe del Ejecutivo autonómico ha insisitido en la importancia de conocer la historia para no repetir los errores del pasado y ha considerado «insólito e inaudito» que haya partidos que consideren que, con la celebración de actos como el de hoy, «se ahonda en las heridas».
En este sentido, ha hecho hincapie en la importancia de que toda la sociedad se sume a la conmemoración y ha lamentado la falta de representación «de todos los grupos parlamentarios asturianos».
Barbón ha recordado algunas de las iniciativas que ha tomado el Gobierno de Asturias en los últimos años, como la aprobación, en febrero de 2022, del reglamento que desarrolla la Ley 1/2019 para la Recuperación de la Memoria Democrática y regula aspectos esenciales de la norma, como el censo de víctimas, las exhumaciones o la creación de un banco de ADN que permitirá identificar a personas desaparecidas.
Entre las prioridades de su gobierno para esta legislatura, Adrián Barbón ha destacado la creación del Instituto de la Memoria Democrática y del Consejo de la Memoria, además de la elaboración del Catálogo de Lugares de la Memoria.
“No nos faltará ambición para dignificar a las víctimas y restaurar los derechos de sus familias, porque nos espolean el deber y la razón. El tiempo del olvido ya ha pasado, es hora de la memoria y la luz”, ha concluido.