(EP) – El atropello intencionado que se ha saldado la madrugada de este domingo con cuatro muertos y ocho heridos, cuatro de ellos graves, ha tenido lugar cuando los invitados de una boda gitana abandonaban el lugar tras la celebración y uno de los asistentes al evento arrolló a varias personas.
Los hechos han tenido lugar sobre las 2.44 horas a la salida del restaurante El Rancho, donde se estaba celebrando una boda gitana con casi 200 personas invitados. Agustín, el encargado del local, ha explicado a Europa Press que el festejo transcurrió con normalidad y no hubo ningún incidente en el interior del establecimiento.
El encargado del local, que en el momento de los hechos estaba en cocina, ha indicado que los invitados empezaron a abandonar el lugar sobre las 2.30 horas cuando de pronto escuchó que un grupo de personas volvía a su interior gritando y pidiendo que llamaran a la Policía, con mucha gente asustada y niños aterrados.
Tanto los agresores como las víctimas no eran de la localidad, según ha indicado el concejal de Seguridad de la localidad, Juan José Crespo. Según los primeros datos recabados por la Policía, el arrollamiento se produjo a la altura del número 6 de la avenida de la Constitución cuando, por causas que se investigan, uno de los asistentes a la boda arrolló a un grupo de personas con su vehículo cuando abandonaban el lugar.
Como consecuencia del arrollamiento, cuatro personas han muerto –una mujer de 70 años y tres hombres de 40, 60 y 17 años– y otras ocho han resultado heridas de diversa consideración, cuatro de ellas de carácter grave, dos potencialmente graves o moderados y otros dos leves. El edil de Seguridad ha indicado que, según las primeras informaciones, ninguno de los heridos presenta riesgo vital.
Tras el arrollamiento mortal, los presuntos autores huyeron del lugar en un vehículo. Finalmente, sobre las 4.00 horas, el vehículo fue interceptado por la Guardia Civil en Seseña (Toledo), a algo más de 50 kilómetros de distancia de la localidad madrileña. El vehículo en el que se encontraban circulaba con la luna rota y le faltaba el parachoques delantero, según fuentes policiales.
La Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia de Toledo y una patrulla del Puesto de Seseña ha detenido a tres personas, un portugués nacido en 1987 y dos menores españoles, nacidos en 2006 y 2007. Se trata de un padre y dos hijos, según han precisado fuentes de la Policía Nacional.
Una cuarta persona ha logrado huir del lugar, aunque se encuentra identificada, han informado a Europa Press fuentes de la Guardia Civil.
El Grupo Sexto de Homicidios de la Policía Nacional se ha hecho cargo de la investigación de los hechos, mientras los detenidos se encuentran a la espera de pasar a disposición judicial.