(dpa) – La consultora británica de diseño e ingeniería Callum, fundada por Ian Callum, legendario diseñador de Aston Martin y Jaguar, ha presentado recientemente un estudio en el que los diseñadores e ingenieros barajan nuevos materiales sostenibles que podrían utilizarse en varias zonas del habitáculo de un coche.
Los fabricantes de automóviles de todo el mundo apuestan cada vez más por el uso de materiales sostenibles. Mercedes-Benz, por ejemplo, ha incorporado materiales de este tipo en el interior de su nuevo prototipo totalmente eléctrico, el Vision EQXX.
Los tiradores de las puertas del EQXX está hechos a partir de fibra de bioacero, más resistente que el acero y biodegradable. Para la tapicería de los asientos, el fabricante utiliza piel artificial fabricada con setas y cactus.
Utilizando como base para la investigación un Porsche 911 ‘restomod’, Callum identificó pulpa de café, cáscaras de huevo, lentejas rojas, nueces y arroz como materiales viables para los interiores de los coches a partir de 2030.
Callum contó con el asesoramiento de la empresa de tecnología ecológica Ottan para encontrar los mejores materiales capaces de sustituir a los plásticos sin dejar de cumplir los rigurosos requisitos de diseño, medio ambiente e ingeniería de un automóvil.
Cumpliendo las especificaciones de temperatura y desgaste, las cáscaras de huevo mezcladas con resina crean un material suave y opaco con una superficie brillante o mate que puede utilizarse, por ejemplo, para las molduras de los interruptores de las ventanillas. Si se añaden cáscaras de nuez a las cáscaras de huevo, el porcentaje de material reciclado pasa del 78 al 84 por ciento.
El arroz o las lentejas caducados pueden convertirse en un material translúcido liso, que, según los ingenieros, es muy adecuado para las zonas iluminadas de un coche, como las cubiertas de las luces o los interruptores luminosos. Como alternativa resistente al fuego, la pulpa de café podría sustituir a los plásticos tradicionales en las molduras decorativas de las inserciones del salpicadero.
Callum también destacó la pulpa de zanahoria púrpura, que produce un color similar al de la morera y que podría aplicarse en las piezas decorativas. Las hojas de árboles, por último, pueden reciclarse para crear una superficie oscura y lisa que ofrece un acabado natural alternativo a las chapas de madera que se utilizan para la consola central o el salpicadero.