El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, y el de Lisboa, Carlos Moedas, coincidieron este martes en pedir que las instituciones trabajen para conseguir una conexión ferroviaria de alta velocidad entre ambas capitales por los beneficios que podría tener.
Así lo expresaron en un coloquio en el que participaron ambos ediles en el marco de la conferencia ‘Inspira Portugal’ que se celebró este martes en Madrid. Almeida valoró que tanto de una mejora de las «conexiones aéreas» como de la unión de las capitales por el AVE ambos «saldrían beneficiados».
Añadió que Madrid «está dispuesto a colaborar» con Lisboa incluso desde un «punto de vista egoísta» porque «lo que sea bueno de colaborar con Lisboa va a ser bueno para Madrid». Esta cuestión se enmarcó también en el reclamo del turista norteamericano que están haciendo ambas ciudades y que se podría ver beneficiado de ese AVE.
«Nosotros estamos trabajando en el mercado norteamericano. Es un turista de alto impacto, es un turista que viene más días de la media normal y, por tanto, yo creo que las grandes ciudades, sobre todo cuando estamos en el mismo espacio geográfico y separados apenas 600 kilómetros, lo razonable es que cooperemos y trabajemos», zanjó.
Por su parte, el dirigente portugués explicó que él y Almeida están «muy en consonancia» en este tema «desde el primer día». Asimismo reflexionó que puede ser un proyecto que vaya en paralelo al desarrollo del nuevo aeropuerto de Lisboa, porque entre Madrid y la capital portuguesa habría «dos ‘hubs’ de dos aeropuertos muy diferentes», enfocados a distintas zonas del planeta.
El alcalde luso añadió que siempre ha estado «en contra» de la otra opción ferroviaria que podría ser Lisboa-Oporto-Vigo. A ese respecto, manifestó que «la conexión Lisboa-Madrid es tan o más importante» porque es «inaceptable» que «dos capitales de dos países como estos no estén conectadas por un tren de alta velocidad». En esa línea, concluyó que Madrid no tiene mar, pero Lisboa sí y que la capital española «tiene tantas otras cosas» que la lusa no tiene, por lo que son urbes «complementarias».