(dpa) – La subida de los precios de los alimentos y de la energía impulsó de nuevo la inflación alemana en septiembre, comunicó hoy la Oficina Federal de Estadística, Destatis.
El índice de precios se incrementó en el noveno mes del año un 1,8 por ciento interanual, según datos provisionales avanzados hoy. En relación al mes anterior, la inflación subió un 0,1 por ciento.
Los altos precios de los alimentos, que escalaron un 3,6 por ciento en relación con el mismo mes del año pasado, y de la energía, que se incrementó un 2,7 por ciento en comparación con septiembre de 2016, contribuyeron de forma decisiva al alza de la inflación.
En la actualidad, la inflación continúa situándose en la eurozona por debajo de esta marca considerada ideal, motivo por el que el Banco Central Europeo (BCE) puso en marcha una política monetaria ultraexpansiva que incluye un programa masivo de compra de deuda y la bajada de tipos de interés hasta su mínimo histórico del cero por ciento.
A finales de octubre, se espera que el BCE anuncie cambios en su política monetaria de cara al año 2018.