Los expertos han alertado de la proliferación de las plagas de insectos, que se ven favorecidos por el aumento de las temperaturas y del carácter estacional del verano, especialmente los mosquitos y las chinches.
En declaraciones a Servimedia, el investigador del Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN), Óscar Soriano, afirmó que, en la actualidad, «España está en una situación delicada por la subida de las temperaturas, lo que conlleva una mayor proliferación” de las plagas de insectos. Además, esto también provoca que “muchas especies de vectores de enfermedades lleguen a España y las transmitan en la población, como la fiebre del Nilo Occidental o la malaria por parte de los mosquitos”.
Sin embargo, recalcó que “es un problema a nivel global, ya que el ser humano se desplaza rápidamente entre zonas geográficas muy lejanas estando contagiado sin evidenciar los síntomas”. Por ello, Óscar Soriano indicó que en España se realizan muchas campañas, concentradas en primavera y verano, para reducir la población de mosquitos y moscas negras.
El objetivo de estos proyectos es “reducir estas especies antes del aumento de las temperaturas y evitar su entrada mediante redes de control de llegada de estas especies de otros países en zonas como puertos, aeropuertos y fronteras”, declaró el investigador del MNCN.
Uno de los problemas que complica su puesta en marcha es la organización de las competencias. Soriano subrayó que estos tratamientos dependen de los ayuntamientos. De esta forma, los municipios “dependen en gran medida de sus medios económicos para reducir la proliferación de estas especies, hasta el punto de necesitar de la ayuda de las comunidades autónomas para realizar estos tratamientos que son caros”.
En la misma línea, el portavoz de Rentokil Initial, compañía que combate las plagas, Jacinto Díez, en declaraciones a Servimedia, vaticinó que “este año habrá una mayor plaga de mosquitos debido al intenso calor sufrido a lo largo de este último año. Junto a ello, también espera un aumento de las chinches, “unos insectos que se ven favorecidos por el aumento del número de viajeros, que la expanden con mayor facilidad”.
MOSQUITOS
Díez señaló que los mosquitos “se están convirtiendo en una preocupación cada vez más común en toda Europa” por el riesgo que suponen para la salud pública. Estos organismos son vectores que actúan como vehículos para transmitir enfermedades como el dengue o la malaria.
Rentokil calcula que existen alrededor de 3.500 especies diferentes de mosquitos en el mundo, pero que, a causa del aumento de las temperaturas ha crecido la expansión de especies invasoras a otras zonas geográficas.
En cambio, las chinches no transmiten enfermedades, aunque su picadura es molesta. Jacinto Díez aseguró que «estos insectos se ven favorecidos por el aumento del número de viajeros” y la recuperación del turismo a niveles previos a la pandemia. Esta especie se caracteriza por transportarse a través de la ropa, las maletas y otros objetos.
No obstante, Jacinto Díez alertó de que también están las cucarachas, que presentan diferentes variantes. La cucaracha más común es la alemana, también conocida como la ‘cucaracha del café’, aunque en España también está la cucaracha oriental o la americana. Estos insectos propagan enfermedades como la salmonella o la giardia.
Para combatir las plagas, Díez aseveró que “lo más importante es la prevención” a través de los controles vectoriales. Este método tiene el objetivo de “limitar la propagación de los patógenos causantes de las enfermedades mediante la reducción o la eliminación de estos con el contacto humano”.