Berlín, 19 sep (dpa) – El secretario de Estado de Cultura de Alemania, Wolfram Weimer, se propone introducir medidas que impidan la promoción cultural de actividades lastradas de antisemitismo.

El plan consiste en «promulgar directrices de financiación que dejen claro que no podemos financiar el antisemitismo con dinero público», declaró Weimer a la página web de noticias «Politico».
Según Weimer, el creciente antisemitismo en el ámbito cultural es intolerable y flagrante. «En los últimos meses hemos observado un aumento del sentimiento agresivo contra los judíos en general, lo que provoca que los judíos en Europa vivan con miedo».
Los judíos son menos contratados para eventos culturales y a menudo son objeto de hostilidad en los escenarios, en «cualquier exposición en cualquier lugar de Alemania, cualquier concierto», afirmó Weimer.
En diciembre de 2023, el entonces ministro de Cultura del gobierno regional de Berlín, el democristiano Joe Chialo, introdujo una cláusula contra el antisemitismo a nivel regional, pero la retiró en poco tiempo debido a objeciones jurídicas.
Chialo quería obligar a los beneficiarios de fondos públicos, entre otras cosas, a comprometerse con una declaración contra el antisemitismo. La base para ello debía ser la definición de antisemitismo de la Alianza Internacional para el Recuerdo del Holocausto (IHRA). Desde el mundo de la cultura se expresó el temor de que esto pudiera limitar la libertad artística.
Productor critica a la industria del cine
El productor de cine alemán Martin Moszkowicz acusó a la industria del cine alemán de callar ante el creciente antisemitismo en el país.
«Un sector que suele defender a viva voz la diversidad y el compromiso social calla cuando se trata de proteger la vida judía», escribió el productor, de 67 años, en un artículo para el diario «Frankfurter Allgemeine Zeitung» («FAZ»).
Moszkowicz criticó que casi toda la industria cinematográfica y televisiva alemana no haya firmado un nuevo plan de cinco puntos de una amplia alianza contra el antisemitismo.
«Ninguna escuela de cine, ninguna gran cadena de televisión, ninguna productora importante, ninguna asociación del sector» la firmó. Citando a los impulsores de la iniciativa, añadió que la mayoría ni siquiera ha rechazado la propuesta, sino que simplemente no ha respondido. «Este silencio es irritante», afirmó.
Indicó que, cuando se les pregunta, se escuchan excusas: «Dicen que quieren permanecer ‘neutrales’. O que los árabes también son semitas, pero no se mencionan en el documento. O bien que firmarlo podría interpretarse como un apoyo a Israel», afirmó.
Moszkowicz, cuyo padre judío sobrevivió al campo de concentración de Auschwitz, señaló que este razonamiento no solo es absurdo, sino también peligroso. «El término antisemitismo es inequívoco: significa odio hacia los judíos. No es posible mantenerse neutral ante el odio, las amenazas y la violencia. Quien busca un ‘término medio’ entre la postura contra el antisemitismo y la postura de los antisemitas, se pone del lado de los antisemitas», escribió.