Madrid, 10 dic (dpa) – Alemania mejoró este año su posición en el ranking del Índice Global de Riesgo Climático, según informaron hoy Germanwatch, la Red Internacional de Acción Climática (CAN) y el NewClimate Institut en la cumbre de Madrid.
Gracias al compromiso de eliminar el carbón de forma progresiva, a las medidas de promoción estatal previstas para la protección del medio ambiente y a los esfuerzos internacionales, Alemania avanzó cuatro peldaños, ubicándose en el puesto 23, detrás de países como la India, Ucrania y Brasil.
La calificación general que recibieron los germanos por parte de las organizaciones ecologistas fue de «moderada».
El Índice Global de Riesgo Climático de la organización alemana Germanwatch valora los esfuerzos de los países en la lucha contra el calentamiento global de forma anual.
En 2019, Suecia sigue liderando este ranking, seguida por Dinamarca y Marruecos.
Sin embargo, las organizaciones de protección del clima también señalaron que ningún país obtuvo una puntuación «muy buena» por lo que volvieron a dejar libres los tres primeros puestos del ranking.
Los Estados Unidos se situaron en el último puesto – directamente detrás de Arabia Saudita y Taiwán.
De los países del G20, sólo el Reinio Unido e India fueron calificados como «buenos». Los británicos recibieron elogios sobre todo por los avances en temas como los gases de efecto invernadero, el consumo de energía y las energías renovables.
Las emisiones per cápita y el consumo de energía siguen siendo comparativamente bajos, se lee en la justificación, que añade que el país también tiene objetivos ambiciosos para el año 2030. Según el informe, la expansión de la electricidad verde avanza, pero el país sigue dependiendo en gran medida del carbón para la producción de energía.
También se evaluó a la Unión Europea (UE) en su conjunto, situándose seis puestos más abajo, en el rango «moderado». Hubo críticas sobre todo en los ámbitos de los gases de efecto invernadero, las energías renovables y el consumo de energía, mientras que la política de protección de clima de la UE fue calificada de «buena».