Jerusalén, 25 jun (dpa) – Alemania pone a disposición de la población de la Franja de Gaza otros 19 millones de euros (20,35 millones de dólares) para ayuda humanitaria, anunció hoy la ministra germana de Relaciones Exteriores, Annalena Baerbock.
La agencia de Naciones Unidas para los refugiados palestinos (UNWRA) y el Programa Mundial de Alimentos están llevando «harina y arroz a familias hambrientas arriesgando sus vidas, porque cada pequeña comida es vital para los niños de Gaza», declaró Baerbock durante una visita a Israel.
La ministra añadió que cada caja de suministros médicos de la Organización Mundial de la Salud ayudaría a «restablecer un nivel mínimo de atención médica» en los hospitales destruidos de la Franja de Gaza.
Entre otras cosas, el dinero servirá para financiar cestas de alimentos que cubren el 90 % de las necesidades calóricas diarias y contienen harina, arroz, azúcar, aceite, garbanzos y leche en polvo, por ejemplo.
Esta mañana, Baerbock trató sobre el futuro papel de la Autoridad Palestina (AP) con el primer ministro palestino, Mohammed Mustafa, en la ciudad cisjordana de Ramala. En opinión de Baerbock, la AP podría desempeñar un papel importante en un orden de posguerra en la Franja de Gaza. A continuación, la ministra se reunió con su homólogo israelí, Israel Katz, en Jerusalén.
Tal y como se anunció a principios de abril, el Ministerio alemán de Relaciones Exteriores reanuda también la financiación de la UNRWA, acrónimo inglés del Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en el Cercano Oriente.
Como primer paso, se pondrán a disposición cinco millones de euros para ayuda alimentaria de emergencia en la Franja de Gaza. Además, la UNRWA recibirá un primer tramo de cinco millones de euros de la contribución voluntaria no condicionada aprobada por el Bundestag (Parlamento alemán).
Esta cantidad se utilizará para financiar las actividades de la UNRWA en Jordania, Líbano, Siria y Cisjordania. Entre ellas figuran la educación y la sanidad.
La UNRWA saltó a los titulares en enero porque Israel afirmó que doce de sus empleados estaban implicados en el ataque del 7 de octubre, perpetrado por organizaciones palestinas bajo el liderazgo de Hamás y que la organización en su conjunto había sido infiltrada por dicha organización islamista, considerada terrorista por numerosos estados.
Un informe de auditoría realizado por expertos independientes concluyó posteriormente que la UNRWA había establecido mecanismos «sólidos» para mantener su principio de neutralidad, aunque, sin embargo, había margen de mejora.
Baerbock hizo un llamamiento a Hamás para que acepte el plan presentado por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, para un alto el fuego en Gaza. El plan se basa en una propuesta israelí y es «la única salida realista al estancamiento de la guerra para liberar a los rehenes y hacia un alto el fuego humanitario», dijo la ministra. «Hamás tiene en sus manos aliviar inmediatamente el sufrimiento de la población de Gaza».
Tras la resunión con Katz en Jerusalén, Baerbock volvió a criticar duramente la creciente violencia de los colonos que siembra el miedo y el terror en Cisjordania. «Parte de la coalición gobernante israelí está incendiando la situación y poniendo en peligro los intereses de seguridad de Israel a largo plazo con su agresiva política de asentamientos», declaró Baerbock.
También criticó «los espeluznantes informes sobre las crueles condiciones de detención de presos palestinos en campos y cárceles israelíes», de los que dijo que «no encajan con la propia pretensión de Israel de ser una democracia y un Estado constitucional».
Las imágenes del despliegue del ejército israelí en Yenín también son «inquietantes y contradicen el derecho internacional humanitario», agregó. Pidió una aclaración exhaustiva. El sábado, soldados israelíes ataron a un palestino herido al capó de un vehículo militar.
En el plano humanitario, con los 19 millones de euros adicionales anunciados, la ayuda humanitaria alemana a los territorios palestinos ha aumentado a 312 millones de euros desde el año pasado. El apoyo se centra en ayuda médica y alimentaria. Otros fondos se destinan a la evacuación de heridos, equipos médicos, apoyo psicosocial y medidas de higiene.
El ministro isrelí de Finanzas, Bezalel Smotrich, considerado de extrema derecha, anunció recientemente que quería retener fondos por un total de 32,5 millones de dólares (unos 30,3 millones de euros) de la Autoridad Palestina y pagarlos en su lugar a las víctimas israelíes de terrorismo.
Baerbock criticó el hecho de que el dinero de aduanas e impuestos al que la AP tiene derecho en virtud de los Acuerdos de Oslo esté siendo ahora completamente bloqueado por las autoridades israelíes.
Ante la creciente preocupación por una escalada del conflicto entre Israel y la milicia proiraní Hezbolá en Líbano, Baerbock calificó la situación de extremadamente peligrosa. «Por ello, todos los responsables deben actuar con la máxima moderación y, sobre todo, Hezbolá debe dejar de disparar contra Israel», exigió.
Baerbock tenía previsto tratar hoy por la tarde la situación actual en el Líbano con el primer ministro interino, Nadschib Mikati, y el ministro interino de Relaciones Exteriores, Abdullah Bou Habib, en la capital libanesa, Beirut.