Potsdam (Alemania), 9 dic (dpa) – Sindicatos y gobiernos regionales lograron hoy un acuerdo en el conflicto salarial para los funcionarios de los 16 estados federados de Alemania, anunciaron ambas partes.
Los responsables del sindicato Verdi y de la asociación de funcionarios dbb llegaron a un acuerdo con TdL, entidad que agrupa a los gobiernos regionales y que actúa como patronal.
Así, los más de un millón de empleados de servicio público regional recibirán pagas extraordinarias libres de impuestos por un total de 3.000 euros (3.231 dólares) en concepto de compensación por inflación y un aumento salarial del 5,5 por ciento. Se trata de las mismas cifras alcanzadas en el acuerdo para el sector público a nivel federal y municipal en abril de este año.
También en esta ocasión los sindicatos habían entrado en la ronda de negociación colectiva con la exigencia de un aumento del 10,5 por ciento de los ingresos con un aumento mínimo de 500 euros mensuales.
Según el acuerdo, de los 3.000 euros, los funcionarios cobrarán 1.800 euros en diciembre. De enero a octubre de 2024, recibirán 120 euros más por mes. A partir del 1 de noviembre de 2024, los ingresos de los más de un millón de empleados aumentarán en 200 euros y a partir del 1 de febrero de 2025 se aplicará un nuevo aumento salarial del 5,5 por ciento. El acuerdo tiene una duración de 25 meses, hasta octubre de 2025.
Para los estados federados, el acuerdo supone unos costes adicionales de 23.900 millones de euros, según el negociador principal de los gobiernos regionales, el titular de Finanzas de Hamburgo, Andreas Dressel. En su opinión, se trata de un «resultado global difícil», pero factible a lo largo de tres ejercicios financieros.
«Es un resultado que mantendrá al día a los empleados estatales», dijo por su parte el jefe del sindicato Verdi, Frank Wernek. Tras semanas de huelgas en universidades, hospitales universitarios y otras instituciones públicas regionales, Werneke añadió que «es un resultado por el que han luchado los propios empleados».
El líder de la asociación de funcionarios dbb, Ulrich Silberbach, se congratuló de que los empleados no tuvieran que hacer ahora «huelgas forzosas».