La Malbaie (Canadá), 9 jun (dpa) – El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quedó entre Angela Merkel y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, ayer en la foto de familia de la cumbre del G7, situación que la canciller alemana aprovechó para hablar con él unos minutos.
En medio de las tensiones que envuelven la relación entre los países europeos, Canadá y Trump en la cumbre del Grupo de los Siete en la ciudad canadiense de La Malbaie, hubo algunas señales distendidas previo a las reuniones formales.
Después de la foto de los líderes, con el río San Lorenzo a sus espaldas y en una tarde soleada, Merkel, que tenía del otro lado a la primera ministra británica Theresa May, giró hacia Trump y se quedó a solas hablando con él, mientras los otros líderes se retiraban caminando.
El G7 es un grupo informal que reúne a los líderes de Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido. La cumbre tiene lugar en un hotel de La Malbaie, unos 140 kilómetros al noreste de Quebec.
También hubo una señal de acercamiento entre Trump y el presidente de Francia, Emmanuel Macron, que en la víspera de la cumbre habían tenido palabras duras para aludirse mutuamente, por el diferendo comercial que enfrenta a Trump con sus socios.
Macron puso en Twitter un breve video en el que se le ve hablando con el presidente estadounidense en un sillón y escribió: «Mantener el diálogo vivo, ahora y siempre».