Bakú, 27 abr (dpa) – Después de que Ferrari ganara dos de las tres primeras carreras del año, el equipo Mercedes buscará no solo no dejar escapar a la escudería italiana en el Gran Premio de Azerbaiyán, sino también dar un golpe sobre la mesa en la Fórmula 1, que dominó en los últimos años.
Lewis Hamilton, la estrella de las «flechas plateadas», aún no ganó esta temporada tras las victorias de Sebastian Vettel en Australia y Bahréin, y la del australiano Daniel Ricciardo, con Red Bull, en China.
La situación es nueva para el equipo alemán, que ganó con autoridad el campeonato en los últimos cuatro años, pero Toto Wolff, el jefe de Mercedes, asume bien el nuevo desafío.
«Hasta ahora, este año tiene todos los ingredientes para ser una temporada legendaria de la F1, una temporada que los aficionados volverán a mirar con una sonrisa en los próximos años», dijo Wolff en un comunicado.
«Y no solo están emocionados los aficionados en casa o en la pista, nosotros sentimos lo mismo. Y sabemos que tenemos un gran desafío en nuestras manos», agregó el austríaco.
El año pasado, Ricciardo ganó en el circuito callejero con un podio inusual, que no incluyó a Hamilton o a los Ferrari.
«Vamos a la carrera de Bakú sintiendo mucha emoción por esa impredictibilidad. Será la primera vez que el Gran Premio de Azerbaiyán sea en abril, con unas condiciones completamente diferentes en los años anteriores cuando íbamos en junio», agregó Wolff.
Hamilton sonó inusualmente crudo, o pesimista, en sus declaraciones hace dos semanas tras el Gran Premio de China, en el que terminó cuarto.
«Somos el segundo, o el tercer equipo ahora, así que debemos mejorar, (…) eso no es imposible», dijo el británico en Shanghai. «Estaba en tierra de nadie. No tenía ritmo así que me aferraba a lo que tenía», añadió.
Mercedes parece tener un problema con la temperatura de los neumáticos. La fecha de la carrera en Bakú, que se corrió antes de lo usual, también supone problemas para los otros equipos, que no tienen datos previos de cómo funcionaban los compuestos en esas condiciones.
Vettel, que es líder a nueve puntos de Hamilton, se vio envuelto en China en una colisión con el holandés Max Verstappen, en la rocambolesca carrera asiática. Fue otro ejemplo de los riesgos del joven piloto, que fue sancionado con 10 segundos.
El alemán aceptó las disculpas de Verstappen pero el jefe de Ferrari, Maurizio Arrivabene, pidió a su equipo mantener la concentración en general.
«Es importante para nosotros mantener la concentración y la determinación», dijo el italiano.
El rendimiento de Ricciardo, en todo caso, dio la impresión de que esta temporada puede ser una batalla de tres por el título, y no solo el duelo de Hamilton y Vettel, como ocurrió en la pasadas temporada.
Por su victoria el año pasado, confianza no le faltará al australiano, que puede llegar al tercer lugar del campeonato de pilotos, en el que está a tres puntos del finlandés Valtteri Bottas, compañero de Hamilton.
Pero Ricciardo, al que los rumores relacionan con Ferrari y Mercedes la próxima temporada, debe asegurarse de no distraerse por la definición de su vínculo con Red Bull, que termina a final de la temporada.
«Debe haber una decisión como tarde en el verano (boreal)», dijo sin embargo Christian Horner, el jefe de Red Bull, a la revista «Auto Motor und Sport». «No queremos esperar siempre», señaló.
Por Martin Moravec (dpa)