(dpa) – El presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, recibió hoy al socio bávaro de la canciller Angela Merkel, el líder cristianosocial Horst Seehofer, en el marco de los contactos que puso en marcha para impulsar la formación de Gobierno y evitar la convocatoria de nuevas elecciones.
Steinmeier, quien goza del respeto generalizado de la clase política germana, se reunió el martes con dirigentes del Partido Liberal (FDP) y de Los Verdes, dos días después de que los liberales dieran por fracasadas las conversaciones para formar una coalición de conservadores, liberales y verdes encabezada por Merkel.
El FDP adujo que sus postulados no habían sido tenidos suficientemente en cuenta y acusó a Merkel de negarles el apoyo en el mes de contactos con conservadores y Verdes.
Steinmeier recibió a Seehofer, que ha condicionado la participación de su Unión Cristiano Social (CSU) bávara a que se limite a 200.000 el número de solicitantes de asilo que ingrese al país por año.
Asimismo se entrevistó horas antes con el presidente del Tribunal Constitucional, Andreas Vosskuhle, en el marco de los esfuerzos por encontrar una solución a la actual crisis política.
Los ultraderechistas de Alternativa para Alemania (AfD) también demandaron ser invitados a las consultas. «En aras de la democracia sería apropiado que el presidente Frank-Walter Steinmeier también invitase a dirigentes de la AfD para debatir sobre la situación actual tras el embarazoso fracaso de los contactos para la coalición Jamaica», dijo la diputada Alice Weidel.
La legisladora sostuvo que Steinmeier no podía ignorar a la AfD, que se erigió en tercera fuerza en las elecciones del 24 de septiembre, con un 12,6 por ciento de los votos.
El jefe de Estado alemán será anfitrión mañana de su correligionario socialdemócrata Martin Schulz, cuyo partido descartó la posibilidad de formar nuevamente una gran coalición con los conservadores de Merkel inmediatamente después de recibir con el 20,5 por ciento el peor resultado de la posguerra en las elecciones generales del 24 de septiembre.
Tras fracasar los contactos para la formación de la alianza tripartita bautizada como Jamaica, la cúpula socialdemócrata avisó que no está a disposición, pero la presión para que reconsideren su negativa va en aumento y ya se escuchan voces dentro del propio partido que cuestionan el «no» y apelan a la responsabilidad hacia el electorado.
Steinmeier deberá proponer al Parlamento un candidato para la elección de canciller. Tras una tercera ronda de votación, en la que basta contar con una mayoría simple, el jefe de Estado germano debe decidir, según el artículo 63 de la Ley Fundamental, si nombra al elegido y allana el camino para la formación de un Gobierno en minoría o si convoca elecciones nuevas.
Alemania tuvo tres veces gobiernos minoritarios en la historia de posguerra, pero por periodos cortos. La convocatoria de nuevas elecciones probablemente no cambiaría de forma fundamental el actual tablero político alemán.
Una encuesta publicada hoy por el instituto Forsa no arroja grandes cambios frente las elecciones de septiembre, con un 31 por ciento para la Unión Cristiano Demócrata (CDU, frente a un 33 por ciento de septiembre) de Merkel y un 21 por ciento del Partido Socialdemócrata (20,5 por ciento).