(dpa) – En un gran espectáculo se convirtió hoy en Kassel el comienzo del desmontaje del «Partenón de libros», la obra de la argentina Marta Minujín compuesta de 67.000 libros prohibidos a lo largo de la historia.
Los visitantes se animaron a retirar y llevarse los libros colocados en la gigantesca réplica del templo griego, que irá perdiendo así la fachada. Su creadora no se mostró triste porque el proyecto llegue a su fin. «Este Partenón va a ser más famoso que el de Grecia», proclamó.
Un día antes varios miles de espectadores se dieron cita en la plaza Friedrichsplatz para ver a la artista colocar el último de los 67.000 ejemplares prohibidos, una edición de «Primavera Romana», del escritor estadounidense Tennessee Williams.
Minujín fue recibida el sábado como una estrella pop en Kassel, con mucha gente que le gritaba «¡Marta!» y le pedía autógrafos.
La construcción, de las mismas dimensiones que el Partenón de Atenas, quedó recubierta por cerca de 67.000 libros donados por editoriales y personas de diversas partes del mundo. Se trata de títulos que están o estuvieron prohibidos, en una señal de protesta contra la censura y la persecución de los autores y a favor del libre pensamiento de los ciudadanos.
Marta Minujín reeditó así el «Partenón» que levantó en 1983 en la ciudad de Buenos Aires con los libros censurados por la dictadura que había gobernado desde 1976 en Argentina, pero esta vez con una proyección mundial.
Hoy, centenares de personas hicieron cola para llevarse un ejemplar. Minujín los llamó a hacerlo mientras tomaba fotos del público. Los organizadores de la documenta señalaron que el desmontaje tardará varios días. Para hoy habían llamado al público a participar leyendo de los libros o recitando, bailando o haciendo música.
La documenta comienza mañana su última semana y cerrará las puertas el 17 de septiembre para volver a abrirlas en cinco años.
Por Göran Gehlen