(dpa) – Un ingeniero de Volkswagen fue condenado por primera vez en Estados Unidos a tres años y cuatro meses de prisión por su participación en el escándalo de manipulación de emisiones de gas en los vehículos diésel.
El juez Sean Cox, de Detroit, dictó una pena de tres años y cuatro meses y una multa de 200.000 dólares contra James Robert Liang. El veredicto fue recibido con sorpresa, ya que la pena excede lo solicitado por la fiscalía.
Liang, ciudadano alemán de 63 años, es acusado de construir un software ilegal que permitió manipular las emisiones de gas en los vehículos diésel. Cox acusó al ingeniero, quien apeló la sentencia, de tener un «rol clave» en el caso.
El ingeniero es uno de los ocho empleados y ex empleados de Volkswagen acusados de conspiración y fraude a las leyes ambientales de Estados Unidos.
Liang, quien trabajó en Volkswagen desde 1982, realizó una confesión y se comprometió a cooperar con las autoridades. Esto benefició su condena, que finalmente fue menor a los siete años de prisión y hasta 400.000 dólares de multa que contempla la ley para este delito.
Sin embargo, la pena aplicada fue superior a la solicitada por el fiscal. «No hay ninguna justificación. Liang no era directivo, no era un superior», dijo el abogado del ingeniero, Daniel Nixon. «No se sentaba en la mesa directiva, se sentaba en una oficina».
Sin embargo, el juez optó por mandar una señal a todas las empresas de que los delitos económicos no quedarán exentos, argumentó en su fallo.
También justificó su decisión en la calificación de Liang como un ingeniero «brillante» de la compañía y en su modo de vida. El ingeniero vive en una zona cara y exclusiva de California, y su salario anual era de 350.000 dólares.
Volkswagen admitió haber falseado sistemáticamente las pruebas de emisiones en septiembre de 2015, un tema que hasta la fecha ha costado a la empresa 22.600 millones de euros (25.800 millones de dólares) en multas, indemnizaciones y tasas legales.