Con la llegada del verano, llegan también las jornadas de playa y de piscina para disfrutar del sol y de las buenas temperaturas. Y son muchas las ocasiones en las que decidimos que nuestro acompañante sea nuestro perro. ¿Pero sabemos realmente cómo protegerle del sol y de los peligros que puedan aparecer en el agua? A continuación os damos algunos consejos para que tanto dueños como mascotas disfrutéis de largas jornadas de playa o piscina sin ningún percance.
Lo primordial es saber protegerle de lo dañino que puede ser el sol, sobre todo en una exposición continuada como va a ser el caso. Para ello, es imprescindible contar, en primer lugar, con un protector solar para perros. Este protector debemos echárselo en las zonas delicadas y en aquellas donde tenga poco pelo, como pueden ser la nariz y las orejas. Lo ideal sería aplicarlo una media hora antes de salir de casa para que sea más efectivo.
Por otro lado y aunque por muchos no sean conocidas, existen también las gafas para perros. Éstas actúan como las gafas de sol normales pero adaptadas para nuestras mascotas, lo cual ayuda también a proteger sus ojos de la radiación solar.
Y como si de nosotros mismos se tratase, debemos también evitar que les dé el sol en las horas de mayor radiación. Debemos tratar de que tengan sombra en la que descansar, así como mucha agua para hidratarse bien siempre que lo necesiten.
Pero lo cierto es que en estos ambientes acuáticos, también se ha de tener en cuenta la seguridad de nuestros perros en el agua, para evitar sustos. Por ejemplo, existen los chalecos salvavidas para perros, que permitirán que nuestros fieles amigos naden tanto como quieran en el agua sin que tengamos que preocuparnos de que ocurra algo.
Y si huimos de la playa, también existen las rampas salvavidas de piscina para perros, unas cómodas rampas que se colocan ancladas en el bordillo de la piscina. Así, nuestro perro podrá subir por ella de manera rápida y fácil siempre que quiera.
Con estos pequeños consejos, podremos pasar un día de lo más completo y tranquilo, disfrutando del verano tanto en la playa como en la piscina con nuestro fiel acompañante. Poder tener una jornada de baño sin tener que preocuparnos constantemente por su seguridad, hará que ambos podamos exprimir al máximo los días de verano.