La Fundación para la Investigación e Innovación Biosanitaria en Asturias (Finba) ha iniciado el proceso para seleccionar los primeros grupos de investigación que trabajarán en la sede que este organismo tiene en el nuevo Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). La vinculación de estos equipos consolidados y emergentes será renovable cada cinco años, previa evaluación positiva, y tendrán derecho al uso de los espacios que determine el Comité Científico Externo, sin perder su adscripción de origen, sea ésta con el HUCA o con la Universidad de Oviedo.
Podrá optar a esta selección el grupo de profesionales reunidos en torno a un investigador principal, que colabore en el estudio de una temática homogénea y que haya realizado proyectos conjuntos financiados en convocatorias nacionales o internacionales a partir del año 2008, además de poseer un registro de publicaciones colectivas de calidad contrastada.
Los grupos candidatos deberán disponer de personal con dedicación exclusiva y de un laboratorio en el antiguo HUCA, o bien practicar investigaciones relacionadas con el Área de Ciencias de la Salud en la Universidad de Oviedo. También deberán elaborar una memoria en la que se plasmen los aspectos sujetos a evaluación.
La convocatoria contempla dos tipos de grupos: consolidados y emergentes. Los primeros son aquéllos que poseen una trayectoria constante en su actividad investigadora, manteniendo una captación regular de recursos competitivos provenientes de organismos públicos y/o contratos u otras asignaciones del sector privado, así como un registro sostenido de publicaciones conjuntas de calidad contrastada u otro tipo de resultados derivados de su actividad investigadora, como patentes, colaboraciones con empresas u otras actuaciones análogas.
El Comité Científico Externo será quien decidirá la consideración de grupo emergente, pero con carácter general se tratará de equipos jóvenes con una trayectoria breve de trabajo común, aunque con potencial para convertirse en grupos consolidados durante los próximos cinco años. Ni la edad del investigador principal, ni la media de edad del grupo podrán superar los 42 años. Los considerados emergentes serán evaluados en función de su trayectoria científica previa, capacidad de liderazgo científico y captación de recursos, adecuación de la línea de investigación a un interés sanitario, etc.
Las solicitudes deberán presentarse en el plazo de quince días naturales, contados a partir del día siguiente a la publicación de la convocatoria. El Comité Científico Externo evaluará las solicitudes y elaborará un informe para cada una de ellas, tomando como base criterios cuantitativos y cualitativos, según la valoración que haga de la relevancia de los resultados de las líneas de investigación seguidas. Se prevé que los equipos que entren a formar parte de la fundación podrán comenzar su actividad en el primer semestre de 2015.
El comité científico, que se encargará de velar para instaurar y mantener el carácter de excelencia en la investigación desarrollada por la institución, está formado por los profesores Guido Kroemer, en calidad de presidente, y Lina Badimon, Eugenio Santos, Ramón Gomis de Barbará, José López Barneo, Isabel Fariñas y Xavier Estivill Palleja. Todos ellos poseen una dilatada trayectoria profesional en el ámbito académico, docente e investigador, y son referentes nacionales e internacionales en la investigación básica y aplicada.
La Finba contará con una dotación presupuestaria próxima al millón de euros. Su actividad se financiará con las aportaciones de patronos, benefactores, recursos captados a través de convocatorias públicas y privadas, y aquéllos derivados de ingresos generados por ensayos clínicos realizados en su ámbito de influencia en la red sanitaria.
Las obras de adecuación funcional del edificio que servirá de sede a la fundación comenzarán en las próximas semanas. El inmueble cuenta con cuatro plantas de uso científico de 75 metros de largo por 16 de ancho, y una más, bajocubierta, donde se encuentran las unidades de tratamiento de aire. La superficie total construida es de 4.657 metros cuadrados. De acuerdo con el programa de la fundación, los laboratorios se agruparán creando espacios comunes de servicios centrales. Cada uno de ellos tendrá una superficie aproximada de 50 metros cuadrados, si bien el diseño se caracteriza por una flexibilidad que permitirá adaptar los espacios a necesidades futuras o unir varios laboratorios sin realizar obra civil.
El patronato de la fundación, promovida por el Gobierno del Principado en cooperación con la Universidad de Oviedo, está formado por trece organismos, entre empresas, entidades, e instituciones públicas y privadas, y tiene compromisos de colaboración con nueve compañías consideradas entidades benefactoras, que se desarrollarán en función de distintas fórmulas que concretarán en los próximos meses con el denominador común de apostar por la investigación de excelencia en el Principado.