Andorra ha sido siempre uno de los destinos más visitados por los españoles y asturianos, y hoy en día sigue siendo el destino preferido para ellos. Esto se debe a una serie de razones que no han cambiado desde que se popularizó el destino.
Andorra se encuentra en los Pirineos, haciendo frontera con España y Francia. Esta cercanía hace que sea asequible llegar hasta allí. Esta ubicación hace que sea una región montañosa en su totalidad.
Además, bastante importante es que tiene precios de alojamientos y actividades más baratos que en otros países donde la demanda es altísima. Las vistas son inigualables, desde cualquier lugar se puede observar un paisaje fabuloso en incomparable.
Sin duda el principal motivo por el que los españoles y asturianos eligen andorra es que cuenta con un gran número de pistas de esquí que suman muchísimos kilómetros esquiables. Sin duda no se pueden separar los términos esquí Andorra.
Las diferentes estaciones de esquí están dotadas de equipaciones de gran calidad, en ellas cada año se invierten grandes presupuestos para mejorarlas y ampliarlas de forma que puedan prestar el mejor servicio posible a los visitantes.
Entre las estaciones más conocidas destacan Grandvalira, con 200 km de pistas y un telesilla recién inaugurado llamado Planell de la Font, y Vallnord, con 83 kilómetros de pistas. En ellas se puede practicar esquí, snowboard, forfaits y clases para niños entre otras actividades.
Hay que decir que la buena calidad de la nieve caída es uno de los principales atractivos para los más aventureros que se atreven con el esquí fuera de pista.
Fuera de pista también se pueden practicar actividades de senderismo y trekking, en los últimos años han tenido un éxito abrumador. Estas son muy apreciadas por quienes viajan con niños y perros puesto que les permite disfrutar de un fantástico día en familia.
Después de un duro y agotador día de esquí, Andorra ofrece la posibilidad de relajarse en sus spas y centros termales. La laguna Caldea ha sido adaptada al turismo de descanso respetando la naturaleza. Cuenta con jacuzzis y todo tipo de instalaciones para el relax que la convierten en la mejor opción para terminar el día.
En definitiva, Andorra mantiene desde hace años una elevada posición entre los principales destinos de invierno. Esto, sin duda, se debe al buen mantenimiento de las instalaciones, la adaptación al progreso y la demanda y por supuesto, a las características intrínsecas del territorio.