Karlsruhe/Berlín, 25 ene (dpa) – Los registros en viviendas y locales de miembros de extrema derecha ordenados hoy por la Fiscalía general de Alemania en varios puntos del país se saldaron con la incautación de numerosas armas, de munición y de artefactos explosivos y con la detención de dos personas, informó el Ministerio público.
Las redadas tenían como objetivo a siete personas pertenecientes al mundo de la ultraderecha sobre quienes recae la sospecha de planear ataques contra agentes de policía, peticionarios de asilo y ciudadanos de origen judío.
Entre ellos se encontrarían también miembros del movimiento «Reichsbürger» (Ciudadanos del Reich), un grupo de la extrema derecha que no reconoce a la República Federal Alemana y niega el Holocausto.
Según informó la Fiscalía general, los sospechosos habían formado una organización terrorista y, para ello, se habían dotado de armas y de munición. No obstante, las autoridades alemanas señalaron que no han encontrado evidencias de que los investigados tuvieran previsto perpetrar un ataque concreto.
Las investigaciones se centran en siete sospechosos de edades comprendidas entre los 35 y los 66 años. Contra seis de ellos pesa la sospecha de haberse asociado para fundar una organización terrorista de extrema derecha. El séptimo de ellos estaría acusado por colaboración con el grupo.
Los acusados, que residían en diferentes regiones de Alemania, estaban conectados a través de las redes sociales y se les acusa de planear ataques desde la primavera (boreal) del año pasado.
El movimiento «Reichsbürger» es un colectivo de la extrema derecha que surgió en el país centroeuropeo en la década de los 80 y que considera que las fronteras verdaderas de Alemania son las de 1937, anteriores a la Segunda Guerra Mundial.
Desde el Ministerio del Interior, calificaron hoy a este grupo de ultraderecha como una «amenaza extremista seria». Asimismo, señalaron que desde hace meses las autoridades vigilan muy de cerca sus pasos.
A tenor de los datos que maneja la Oficina de Protección de la Constitución de Alemania (BfV) -servicio secreto en el ámbito nacional- este movimiento cuenta con unos 10.000 simpatizantes, de los que entre 500 y 600 serían extremistas de derecha.
Los «Reichsbürger» acapararon la atención mediática internacional en noviembre después de que uno de sus miembros abriese fuego contra la Policía durante un registro causando la muerte de un agente de la Policía e hiriendo a otros tres.