Fráncfort, 9 dic (dpa) – A pesar de la incertidumbre que generan los acontecimientos políticos globales ocurridos recientemente, el Banco Central alemán, el Bundesbank, prevé que la economía germana continúe registrando un crecimiento estable en el corto y medio plazo, informó hoy el presidente de la entidad financiera, Jens Weidmann.
«El principal factor que apoyará la economía es un activo consumo interno que se ve favorecido por una situación favorable del mercado laboral y por el incremento de ingresos en los hogares», señaló el banquero durante la presentación de las nuevas proyecciones del Bundesbank.
El organismo revisó al alza sus previsiones de crecimiento para este año y para el próximo, fijando valores ligeramente superiores a los pronosticados en sus últimas proyecciones del mes de junio.
Así, desde el Bundesbank esperan que el Producto Interior Bruto (PIB) de Alemania experimente un crecimiento anual de un 1,8 por ciento tanto en 2016 como en 2017 (frente al 1,7 pronosticado en junio para 2016 y el 1,4 por ciento para el próximo año).
Para los dos ejercicios siguientes, desde la entidad prevén que la coyuntura del país ralentice ligeramente su ritmo de crecimiento. Esta caída se justifica por el aumento de los precios de la energía, que afectará al ánimo de los consumidores.
Para 2018 el organismo pronostica un incremento del PIB de un 1,6 por ciento. En 2019 sus proyecciones apuntan a un crecimiento económico del 1,5 por ciento.
Por otra parte, las exportaciones, que en la actualidad experimentan una caída en la primera economía de Europa volverán a recuperar fuerza en el medio plazo, pronostica el Banco Central.
Además, dado el buen desempeño económico del país y el actual bajo nivel de los tipos de interés, la entidad financiera estima que el Estado logrará cerrar los próximos ejercicios con superávit, por lo que podrá ajustarse sin problema al Pacto Europeo de Estabilidad que exige un déficit no superior al 3 por ciento.