Leverkusen (Alemania), 4 dic (dpa) – El mexicano Javier «Chicharito» Hernández atraviesa una indisimulada crisis goleadora en el Bayer Leverkusen.
«Está claro que una estadística así no pasa sin dejar huella incluso por un jugador experimentado como él», dijo el entrenador del equipo, Roger Schmidt, tras el 1-1 ante el Freiburg el sábado.
Desde hace siete partidos de la Bundesliga y 456 minutos, el delantero mexicano no marca un gol. Ni siquiera desde el punto de penal logra Chicharito truncar la racha.
«Es extremadamente inusual», dijo Schmidt, sobre el error desde la pena máxima del mexicano en el minuto 88 que podría haber dado la victoria a su equipo.
El atacante de 28 años disparó al centro de la portería rival y el arquero Alexander Schwolow se quedó quieto y despejó con el pie. «Reaccioné de forma intuitiva», dijo el portero, que alargó una notable serie de errores del Leverkusen desde los once metros.
El Bayer no pudo convertir ninguno de sus cuatro penales en esta temporada. Hakan Calhanoglu erró ante el Leipzig, Charles Aránguiz frente al Augsburgo y Chicharito también ante el Frankfurt (en esa ocasión con un disparo al poste).
La sequía del mexicano es significativa para el Leverkusen. En la pasada temporada, el delantero fue uno de los principales responsables de la clasificación para la Liga de Campeones con sus 17 goles en 28 partidos.
La actual campaña también empezó bien con cinco goles. Pero su último gol en un partido oficial lo logró el 1 de octubre. Desde entonces, el Bayer sólo pudo ganar dos partidos.
Independientemente del penal, el ex jugador de Manchester United y Real Madrid desperdició también varias buenas oportunidades ante Schwolow. «Sé que es el que más se enfada con eso. Antes convirtió muchos penales con seguridad», dijo Schmidt.
El entrenador se esforzó mucho en sostener mentalmente a su atacante. «Chicharito ha trabajado mucho y se habría merecido el gol del triunfo. Estoy convencido de que volverá a marcar», añadió.
Schmidt tiene que manejar con cautela su delantera. Kevin Volland estará unas ocho semanas fuera por una compleja lesión en el muslo. Admir Mehmedi también tiene problemas físicos.
Sin dinamita en la delantera, el conjunto alemán, octavofinalista en la Champions League, está mostrando un rendimiento mediocre en la Bundesliga. «Tenemos que exigirnos ganar en casa al Freiburg. No lo hicimos. Nos falta un poco de confianza en nosotros mismos, aprovechar las oportunidades», dijo el atacante Julian Brandt.
Los 20 goles que el Leverkusen ha logrado en los 13 partidos disputados en la Liga le han dado 17 puntos y lo tienen en la novena posición de la tabla.
«Hasta Navidad tenemos aún cuatro partidos que nos gustaría ganar, así que levantemos la cabeza y a seguir», pidió Brandt.
Por Roland Leroi