Berlín, 7 nov (dpa) – La reunión a tres bandas mantenida el domingo entre la canciller alemana, Angela Merkel, y los líderes de de los otros dos partidos que sustentan la coalición de Gobierno, Horst Seehofer de la Unión Socialcristiana bávara (CSU) y Sigmar Gabriel del Partido Socialdemócrata (SPD), terminó sin que llegaran a un acuerdo para elegir un nuevo Presidente Federal, según pudo saber dpa.
Los tres dirigentes no lograron alcanzar un consenso al respecto, motivo por el que decidieron posponer las negociaciones. La renuncia del actual Jefe del Estado alemán, Joachim Gauck, a permanecer otros cinco años en el cargo obliga a Merkel a buscarle a un sucesor mientras prepara la campaña para las elecciones generales de 2017.
Desde el SPD apuestan por el actual ministro de Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, como el candidato perfecto para hacerse con la Jefatura del Estado, una opción que no acaba de convencer a los conservadores.
Otros nombres que se barajan son el del ministro de Finanzas, Wolfgang Schäuble, el de la responsable de la cartera de Defensa, Ursula von der Leyen o el del presidente del Bundestag, Norbert Lammert.
El todavía presidente federal alemán, Joachim Gauck, anunció a comienzos de junio que desistía de presentarse a un segundo mandato alegando razones de edad.
El antiguo pastor protestante y activista de derechos civiles en la extinta Alemania comunista, de 76 años, asumió la presidencia de Alemania en 2012 y desde entonces ha sabido granjearse la simpatía de los alemanes.
El presidente alemán tiene competencias limitadas y ejerce una función más bien protocolaria. Cobra importancia en caso de ser disuelto el Parlamento o de quedar un gobierno en minoría.
El presidente es elegido en una votación secreta por la Asamblea Federal, un organismo integrado por todos los diputados de la Cámara Baja e igual número de representantes de los 16 estados federados, entre los cuales suelen figurar personalidades de la cultura o el deporte. La elección será celebrada el 12 de febrero de 2017.