(dpa) – La canciller alemana, Angela Merkel, criticó hoy a las autoridades regionales del estado federado de Sajonia por no haber podido evitar que el supuesto terrorista sirio, acusado de planear un atentado en Alemania, se ahorcara en su celda en la prisión de Leipzig, en el este del país.
«Cuando tiene lugar un suicidio en una instalación penitenciaria, entonces algo ha ido mal puesto que no se han advertido a tiempo las señales de aviso», declaró su portavoz, Steffen Seibert, sobre el suicidio en la ciudad sajona.
Además, en el caso de Yaber al Bakr esto significa que no podrá ser sometido a ningún otro interrogatorio, recordó. «Esto hace más difícil el trabajo de los investigadores», agregó.
Merkel se sumó así a las declaraciones del ministro de Interior, Thomas de Maizière, que lamentó el jueves la pérdida que supone para avanzar en la lucha antiterrorista, ya que la muerte del sirio de 22 años dificulta la investigación sobre posibles cómplices, cerebros y redes implicados en los planes de atentar en Alemania.
La canciller alemana se suma a la exigencia del ministro de Interior de llevar a cabo una investigación completa y rápida de lo sucedido, señaló Seibert.
Al Bakr, que había llegado a Alemania en 2015 como refugiado, había sido detenido la madrugada del lunes en Leipzig, después de que tres refugiados sirios que le habían dado alojamiento el sábado se dieran cuenta de que era el hombre buscado por las autoridades y lo entregaran.
La detención tuvo lugar dos días después de un intento de la Policía de apresarlo en Chemnitz, a 85 kilómetros de Leipzig. Los efectivos encontraron en su vivienda en Chemnitz 1,5 kilos del explosivo altamente peligroso TATP. De acuerdo con datos de los servicios secretos alemanes, el sirio planeaba un atentado contra un aeropuerto de Berlín.