Vivimos rodeados de mensajes publicitarios.Tanto, que los consumidores manifiestan abiertamente sentirse abrumados por el bombardeo constante de información al que se ven sometidos. Sin embargo, un reciente estudio elaborado a los consumidores estadounidenses demuestra que existe una salvedad: los regalos publicitarios. Ocho de cada diez personas encuestadas (83%) se muestra a favor de recibir artículos promocionales y a casi la mitad (53%) le gustaría recibirlos con más frecuencia. Además, un 38% reconoce que este tipo de productos son un recordatorio constante del anunciante.
La encuesta demuestra con cifras reales la efectividad que tienen los regalos publicitarios entre clientes y potenciales clientes, especialmente cuando acuden a grandes eventos y ferias de productos, como The e-show. En estos casos, un 23% de los visitantes afirma que recogería cualquier regalo publicitario que le ofrecieran, mientras que un 69% reconoce que lo guardaría si le encontrara alguna utilidad. Tan solo un 5% señala que recogería un producto promocional solo en el caso de resultarle atractivo y un 3% no lo admitiría en ningún caso.
Sorprende también la capacidad que tienen los regalos publicitarios de integrarse en la vida de la persona que los recibe. El estudio demostró que un 91% de los encuestados tenía al menos un artículo promocional en su cocina, un 74% en su área de trabajo y un 55% almacenado en algún cajón o armario de su casa.
Por otra parte, preguntados los encuestados por algún regalo publicitario recibido en los últimos años, un 76% de los mismos fue capaz de recordar de qué producto se trataba, quién era la empresa que se lo regaló y qué mensaje transmitía, lo que demuestra la gran efectividad de utilizar artículos promocionales como herramienta de determinadas campañas publicitarias para llegar al gran público.